Recomendación N°142

Recomendaciones

Exhortación de la Defensoría de Vecinas y Vecinos de Montevideo a la Intendencia de Montevideo sobre el Concejo de Niñas, Niños y Adolescentes.
Secretaria General de la Intendencia de Montevideo
Dra. Viviana Repetto
Asunto: Solicitud de revisión al desarrollo del Concejo de Niñas, Niños y Adolescentes

 

Desde la Defensoría de Vecinas y Vecinos de Montevideo, como institución de derechos humanos con mandato de promover, proteger y defender los derechos de la ciudadanía en el ámbito departamental, “con funciones independientes del Gobierno Departamental, sin perjuicio de las atribuidas a las Juntas Locales, Concejos Vecinales y Municipios establecidas en leyes y decretos correspondientes” (Decreto Nº 38.844, Intendencia de Montevideo, Art. 1, 2013).

Nos dirigimos a ustedes para expresar una preocupación formal respecto al modo en que se desarrolló la actividad promovida por su entidad, enmarcada en el denominado Concejo de Niñas, Niños y Adolescentes, proyecto basado en el artículo N°12 de la Convención de los Derechos del Niño que promueve la participación paritaria de la niñez desde una perspectiva de derechos en los diferentes ámbitos de expresión de ciudadanía:

Valoramos la intención de generar espacios de participación para niñas y niños, así como el esfuerzo por incluir sus voces en instancias públicas. No obstante, observamos que el proceso llevado a cabo incurre en debilidades sustanciales que comprometen el efectivo cumplimiento del derecho a la participación de la infancia, consagrado en el Artículo N°12 de la Convención sobre los Derechos del Niño, así como en marcos normativos nacionales y departamentales. 

Las características de la participación de NNA debe cumplir al menos las siguientes condiciones:

1.  Participación simbólica sin incidencia efectiva

La convocatoria de niñas y niños al ámbito parlamentario, la toma de fotografías, publicación de informe y otras acciones de difusión pública —realizadas con consentimiento informado de sus familias— no se vieron acompañadas por un proceso que asegurara la incidencia real de sus propuestas. La falta de respuestas o mecanismos institucionales de seguimiento transforma la experiencia en una forma de participación simbólica, que corre el riesgo de instrumentalizar la presencia infantil sin otorgarle valor deliberativo.

2.  Falta de transparencia en la documentación del proceso

La ausencia de un documento oficial que registre lo expresado por niñas y niños durante la instancia debilita seriamente los principios de transparencia, accesibilidad y rendición de cuentas que deben regir toda práctica participativa. Esta omisión no solo afecta el derecho de acceso a la información, sino que impide a los propios niños y niñas conocer el impacto de su intervención. La sistematización de lo expresado por las infancias incurre en posicionarnos desde una perspectiva adultocentrista.

3.  Derechos potencialmente vulnerados

La participación de la infancia en espacios institucionales debe ser concebida no como un acto simbólico o decorativo, sino como el ejercicio de un derecho. De acuerdo con los marcos de derechos humanos, los Estados y sus instituciones —incluyendo los gobiernos departamentales— tienen la obligación de garantizar que las opiniones de niñas y niños sean debidamente escuchadas, consideradas y respondidas, en todos los asuntos que les conciernen.

La actuación de la Defensoría del Vecino deberá promover el respeto de los derechos humanos dentro del Departamento, el mejor cumplimiento de los servicios departamentales y/o municipales y el logro de una mayor transparencia y eficacia de la gestión del Gobierno Departamental. (Decreto N.º 38.844, Intendencia de Montevideo, Art. 2, 2013)

El art.14 del Decreto 34.844 (2013) estipula como una de las atribuciones de el/la titular de la Defensoría del Vecino “Solicitar informaciones y formular recomendaciones o sugerencias tendientes a las correcciones que a su juicio fueren pertinentes respecto del cumplimiento de los servicios, así como de los trámites y aplicación de normas y reglamentaciones. 

En función de lo anterior, desde la Defensoría solicitamos respetuosamente:

Que se emita una devolución institucional dirigida a los niños, niñas y familias de la Escuela N°208, Escuela N°255 y Escuela N°326 comunicando los resultados del proceso y el destino de sus propuestas.

 Que se revise el diseño del Concejo para las Infancias, con el fin de fortalecer sus mecanismos de seguimiento, incidencia real y transparencia, alineándolo con los estándares de derechos humanos que rigen en esta materia.

Reafirmamos la capacidad de los niños, niñas y adolescentes para proyectar su creatividad a partir de la realidad que viven y cómo comprenden los problemas que enfrentan en su entorno. Sin embargo, en el año 2024 el enfoque del Concejo pasó de imaginar un “barrio ideal” a proponer soluciones viables y concretas para su comunidad. En última instancia, las y los integrantes del Concejo Municipal felicitaron a las niñas, niños y adolescentes participantes y señalaron la importancia que tienen sus opiniones e ideas, realizando una devolución a cada propuesta y asumiendo el compromiso de llevar a cabo algunas de ellas en función de sus posibilidades (Publicación Concejo NNA 2023-2024, pp.43).

Es entonces necesario repensar la finalidad del Concejo, ¿le estamos asignando presupuesto? ¿Cuáles son las posibilidades reales de concreción de estas propuestas?

Es necesario definir las condiciones previas y limites que forman parte de la participación genuina.

Dentro de los estándares para una participación ética y de calidad de las infancias, Unicef estipula en su punto 9 a la rendición de cuentas; “posterior a la participación, los niños, niñas y adolescentes deben recibir una devolución con los resultados del proceso, considerando cómo están siendo sus voces interpretadas y utilizadas, de qué forma ellos han podido incidir en los resultados y en los casos que corresponda, cómo pueden mantenerse involucrados en actividades futuras.”

Desde la Defensoría reiteramos nuestra disposición a colaborar en el fortalecimiento de políticas públicas participativas, inclusivas y respetuosas de los derechos de niñas, niños y adolescentes, promoviendo una cultura institucional que reconozca sus capacidades, saberes y protagonismo ciudadano, impulsando a nuestra Montevideo como una de las Ciudades Amigas de la Infancia.

Quedamos a disposición para ampliar o acompañar esta solicitud por los canales institucionales correspondientes.

Firma del titular actual de la Defensoría Daniel Arbulo  

Lic. Daniel Arbulo

Titular de la Defensoría de Vecinas y Vecinos de Montevideo