Uruguay ratificó en Viena su política integral y abogó por fortalecer enfoque de género

La 58ª Sesión de la Comisión de Estupefacientes de Naciones Unidas se está llevando a cabo en Viena desde este lunes 9 y hasta el 17 de marzo. Uruguay participa con una delegación compuesta por representantes de Cancillería y de la Junta Nacional de Drogas.
En ese contexto, el jefe de la delegación, el secretario general de la Junta Nacional de Drogas, Milton Romani, advirtió este lunes durante su intervención que en el problema mundial de las drogas, el enfoque de género es un punto inexcusable.
“Entre los daños ocasionados por el crimen organizado, pero también por políticas de drogas desequilibradas, las mujeres son víctimas de la violencia, de la falta de proporcionalidad penal entre el daño y las penas”, advirtió el jerarca.
Fortalecer esa perspectiva e incorporarla al reto de UNGASS 2016 (una sesión especial sobre el problema mundial de las drogas que realizará Naciones Unidas en 2016), es imprescindible, sostuvo.
Durante su intervención, remarcó que el Presidente de la República, Tabaré Vázquez, ha ratificado en todos sus términos la Estrategia Nacional sobre Drogas, la continuidad de las políticas públicas en esa materia y la firme determinación de continuar la cooperación internacional, bajo el principio de la responsabilidad común y compartida con sentido de equidad.
“Abogamos y alentamos por un enfoque integral y equilibrado en la política de drogas, por su debida adecuación con los instrumentos internacionales de derechos humanos; la resolución 51/12 del 2008 que patrocinó Uruguay insta a la promoción de los derechos humanos y una adecuada integración de los tratados internacionales de fiscalización de drogas con los instrumentos de derechos humanos”, recalcó Romani.
Recordó asimismo, que Uruguay ha insistido todos estos años, en promover la apertura de un debate amplio y fecundo sobre el modelo actual que en la región y el mundo ha sido conocido como “guerra contra las drogas”.
En otro momento de su intervención, puntualizó que hay un diálogo político abierto en nuestra región, tanto en los foros regionales como en la sociedad civil y en la academia que auguran importantes insumos.
Se trata -aseguró- de garantizar un debate franco y abierto, inclusivo, sin tabúes, con la más amplia participación de todas las agencias internacionales que abarcan la multidimensionalidad del fenómeno de las drogas.
Regulación de mercados
En su alocución, Romani hizo un breve repaso del camino emprendido por Uruguay a partir del primer Gobierno del Frente Amplio en 2005, con la regulación del mercado de las drogas.
En ese marco, recordó que en el 2006 nuestro país fue líder en la aplicación del Acuerdo Marco sobre Tabaco y avanzó en la regulación del mismo.
Recordó también que el gobierno anterior, presidido por José Mujica, sancionó la Ley N°19.172 que regula la producción, distribución y venta de cannabis, que avanzó posteriormente con su decreto reglamentario y su implementación y que se sancionaron los decretos reglamentarios para la producción de cáñamo y para la utilización de cannabis con fines médicos.
Asimismo, se instalaron los laboratorios para la producción y la generación de trazabilidad que impiden el desvío y se creó el Instituto de Regulación y Control del Cannabis (IRCCA) que lleva adelante las guías y el control con el registro obligatorio y excluyente de los cultivadores domésticos y los clubes de membrecía.
Paralelamente, se están dando los pasos necesarios para el otorgamiento de las licencias a empresas que producirán en tierras estatales y realizarán su distribución, mediante un software especial para el registro de usuarios, respetando la identidad como dato sensible.
Se ha conformado y funciona un Comité Científico Asesor integrado por notables y distinguidos académicos, ex rectores de varias facultades, que han organizado una red de consultas integrada por 119 expertos nacionales e internacionales y que está realizando el monitoreo y evaluación de la aplicación de esta ley y del modelo regulatorio.
“El camino de la regulación de mercados es un pensamiento coherente para el control de las sustancias que eventualmente pueden causar daños (tabaco, cannabis, alcohol). Constituye un sistema de control más eficaz, que respeta derechos humanos y protege la salud pública y realiza un acercamiento del Estado a las poblaciones vulnerables y consumidores problemáticos”, enfatizó.
“No creemos, ni queremos, ser modelo para nadie. Es una experiencia uruguaya, la estamos evaluando y hemos invitado a expertos y organismos internacionales a acompañar el proceso de evaluación y monitoreo de este novedoso modelo”, puntualizó finalmente Romani.