Escribir en la Web
- Evitar las repeticiones, las redundancias, las muletillas y los comodines, que ensucian el texto y lo vacían de significado.
- Redundancias: Son repeticiones innecesarias de ideas. En el día de hoy (Hoy) / El pasado martes 22 de enero de 2009 (El martes 22 de enero de 2009) / Lapso de tiempo (Lapso).
- Muletillas: Son más comunes en la oralidad. Constituyen expresiones en las que el hablante se apoya como “este”, “y ta”, “ehhh”, etc.
- Comodines: Son palabras que usamos en los textos (generalmente adjetivos) que parecen llenarlos, pero que en realidad no aportan nada y muchas veces son lugares comunes del discurso. Una cosa es que un crítico de cine diga “la película muestra una trama sólida”; a que diga “la película es una muestra maravillosa de la condición humana”.
- Sustituir los verbos ser o estar por otros con más fuerza y significado.
- Soy Juan (Me llamo Juan) / Los alumnos estarán yendo de excursión próximo jueves. (Los alumnos se irán de excursión el próximo jueves).
* Tomado de María Cristina Dutto y Silvana Tanzi: “Taller de Expresión Escrita”, Instituto CLAEH, marzo a junio de 2009. (Los ejemplos son nuestros).
Género narrativo y periodístico
“La estructura básica de un texto es: introducción, desarrollo y conclusión o remate. El criterio para organizarlo dependerá de su naturaleza, de la temática que aborda, del objetivo que persigue, del lector al que va dirigido. Los textos expositivos (informativos, científicos, argumentativos) suelen organizarse en forma lógica, es decir, aquella que sigue el modelo del razonamiento deductivo (de lo general a lo particular), del modelo inductivo (de lo particular a lo general) o una combinación de ambos. También pueden optar por una estructura cronológica: aquella que organiza el contenido según cómo se sucedieron determinados acontecimientos o procesos”.*
En el texto narrativo, la pirámide responde a una necesidad genérica rela-cionada a la presentación y el avance de la intriga. Por ejemplo, en la nove-la policial se va de menos a más, de modo de presentar los acontecimientos (usualmente un asesinato) y construir a partir de él la intriga que hará avanzar la acción hasta la resolución del conflicto: encuentro del asesino y reconstrucción del crimen. El género narrativo responde al esquema: principio, nudo, desenlace.
“Veo, luego leo”: Organización del texto en la Web
La importancia del copete
Los contenidos Web deben adecuarse a la estructura de pirámide invertida. Como lo que se pretende es informar y no, generar una intriga, los hechos o las ideas se presentan en orden de importancia decreciente (de lo más a lo menos importante). Lo esencial aparece en el primer párrafo, a lo sumo en el segundo, y los siguientes amplían la información con datos de menor relevancia. Un copete (o primer párrafo resumen de un artículo) debe responder las cinco preguntas conocidas como “Las cinco W del periodismo”. En gub.uy sugerimos contestar el qué de la información, ya que ayuda a identificar su foco.
Las 5 W:
¿Qué? (what) Es decir, explicar lo acontecido.
¿Quién? (who) Los involucrados en el hecho noticioso.
¿Cómo? (how) La manera en que se dio el acontecimiento. (Cuando el copete debe ser breve, no es necesario responderla).
¿Cuándo? (when) El día, la hora (no es primordial) y el momento en que se presentaron los hechos.
¿Dónde? (where) El lugar de los hechos.
Elementos para la estructura de un texto Web
Un inicio relevante
Todos los textos responden a una lógica interna, y dentro de ella el inicio es fundamental. En el caso de una página Web esta idea se redobla, ya que el lector lee los textos escaneando visualmente la información que busca. El contenido de un portal es factible de perderse si los inicios del los textos no son lo suficientemente ágiles y atractivos como para captar la atención del visitante del sitio.
El título de una página es el primer acercamiento que el lector tiene con la información que leerá. En la Web los títulos son muy importantes ya que si estos no tienen la fuerza suficiente para captar la atención del lector, éste probablemente abandone el sitio antes de seguir leyendo.
El título:
“Debe ser el texto más prominente de la página, colocado en un lugar absolutamente central y destacado (debajo del cabezal, arriba de todo otro contenido y alineado a la izquierda es el ideal). La prueba máxima de tamaño y ubicación del título de la página es cambiar los caracteres a griego y preguntarle a alguien si puede señalar con su dedo el título en la pantalla. Si lo hace sin errores, el título está correctamente ubicado y tiene el tamaño adecuado.
”Debe estar redactado de la forma más directa posible, tratando de generar una expectativa exacta acerca del resto del contenido de la página. Después de hacer clic en un link aparece una página. El visitante va a leer lo primero que encuentre (si el título está bien ubicado y tiene un tamaño preponderante será probablemente el elegido) con el fin de decidir si llegó a un contenido útil o debe seguir navegando/buscando. El título tiene que estar redactado de forma de contestar a la mayor cantidad de visitantes esta disyuntiva sin ambigüedades”.
El subtítulo:
“El resto de los títulos, habitualmente llamados subtítulos, cumplen con respecto al texto que encabezan el mismo rol que el título cumple con el documento. Al igual que el título de la página, su ubicación y el tipo de letra deben indicar sin ambigüedades su condición, lo que se puede traducir en una colocación que marque cuál es el texto que está encabezando y un tamaño de letra que lo resalte como título sin dejar dudas que no se trata del título de la página sino de un título secundario.
”En una ojeada a la página, un paquete de subtítulos bien redactados y colocados (más cerca del párrafo que titula que del anterior), dan un pantallazo rápido, completo y con poco esfuerzo de qué es lo que vamos a obtener si leemos la letra chica de la página que estamos mirando”.
Información dosificada.
El lector medio tiene una capacidad limitada de asimilación de conocimientos; por lo tanto, no se le pueden presentar todos juntos, en un bloque compacto y pesado. Lo recomendable es comenzar con el elemento más importante y luego ir añadiendo los demás poco a poco.
Ténica: decir, decir y decir
“Una técnica de escritura muy útil a la hora de crear contenidos Web es la técnica de "Decir, Decir y Decir". Según esta técnica, cada documento debe estructurarse con un resumen de su contenido, seguido de la ampliación del contenido y por último un resumen de cierre. De esta forma, la misma idea se expresa tres veces de tres formas distintas, con tres niveles de detalle distintos, de ahí el nombre de Decir, Decir y Decir.
”La utilización de esta técnica ayuda la lectura no secuencial típica de los visitantes de un sitio Web, ya que la lectura parcial da de por sí una idea razonablemente completa del conjunto del contenido del texto.
”La técnica de “decir, decir, decir” contribuye a que el lector Web pueda acceder a la información aun escaneando la página. El texto Web debe entenderse como un todo que puede ser comprendido por cada una de sus partes. A esto se le llama escritura auto-similar”.
Escritura autosimilar
“Un texto auto-similar es un texto que al ser dividido en textos más pequeños, cada uno de ellos sigue manteniendo sentido. La idea de auto-similitud le aporta al texto la capacidad de que el internauta elija qué partes del documento leer y en qué secuencia hacerlo, manteniendo la capacidad de transmitir el conjunto de ideas que el autor se propuso transmitir cuando lo escribió. Si partimos una novela en tres partes, inclusive aplicando un buen criterio y la mejor buena voluntad, no obtendremos tres novelas más cortas. Sería deseable que si partimos en tres un contenido Web, obtengamos tres contenidos más cortos, con menos detalle, pero que siguen teniendo sentido como contenidos Web”.
La unidad del texto
Se apoya en dos pilares: la coherencia temática —es decir, en la idea central que se desarrolla— y la cohesión, que se manifiesta en la elección de voz (primera persona del singular, plural o impersonal), elección del tiempo verbal y del tono del texto (solemne, humorístico, etc.).
Recomendaciones para redactar en la Web:
- “Escritura sobria: En contraposición con la escritura promocional, rica en adjetivos, metáforas y autoalabanzas, en la Web funciona mejor el estilo objetivo, parco en adjetivos, frases irrelevantes y muy, pero muy mesurado a la hora de elogiarse a sí mismo.
- ”Escritura Concisa: La comprensión y recordación de textos en la Web se ve incrementada cuando los textos están escritos con un estilo conciso, compacto. Esto tiene sentido si se parte de la base de que los visitantes leen poco. En general, si el punto de partida es un folleto promocional, un texto conciso escrito para la Web contendrá solamente entre un 30 y un 50 por ciento del texto original.
- ”Escritura ojeable (scannable): La utilización de títulos, subtítulos, resúmenes, copetes, colgados, distintos tamaños de letra, resaltados en negrita, etc. permite ojear el contenido del documento sin obligar a una lectura secuencial. Párrafos cortos (entre tres y seis renglones) funcionan muy bien, cada uno conteniendo una única idea”.
Los párrafos
"Tal vez los párrafos sean los elementos más discutibles. Sin embargo las pruebas de usabilidad muestran con claridad que hay muy baja probabilidad de que un internauta lea completo y de una vez un párrafo largo (más de 8 renglones) y esta probabilidad baja si la letra es pequeña. Hay alta probabilidad de que los visitantes lean solamente la primera línea del párrafo o las dos primeras. En resumen: funcionan bien los párrafos cortos (entre 3 y 6 renglones) donde en la primera línea se expresa una idea completa”.
El cierre o conclusión
“El final del texto debe convencer o hacer reflexionar sobre las ideas expuestas. El valor de un buen final está en su conexión lógica con el texto en general, con el tema, los argumentos, el tono y el estilo”. El cierre debe tener presente la técnica de “decir, decir, decir” y resumir, con claridad, las ideas expuestas en los párrafos anteriores.
Uso de los paréntesis
“Un paréntesis debe contener datos que den utilidad al texto (una fecha, un sitio), pero el paréntesis que excede las dos líneas, o que adquiere vida propia, obliga a rehacer la frase, quizá partiéndola en dos. La frase principal debe conservar su ilación gramatical tras el cierre del paréntesis, como si éste no hubiera existido. Ej: Las asambleas (la última duró casi cuatro horas sin ningún descanso) se celebraron en el salón de actos. Puede darse la necesidad de incluir paréntesis dentro de otro paréntesis. En este caso, el paréntesis interior será recto (también llamado “corchete”). Ej: Una de las últimas novelas que publicó Galdós (algunos estudiosos consideran su obra Fortunata y Jacinta [1886-87] la mejor novela española del siglo XIX) fue El caballero encantado (1909)”.
Uso de listas
“En la Web funcionan muy bien en la mayoría de los casos las listas con viñetas (bullets) y las listas numeradas. En general, siempre que hay que enumerar cosas o conceptos, las listas con viñetas son una herramienta que mejorará nuestra página.
Las listas permiten además agregar contenido sin empastar el total, al permitir destacar a modo de título las tres o cuatro primeras palabras del párrafo de cada viñeta”.