A instancias de Uruguay

OEA aprueba resolución promoviendo enfoque de derechos humanos en problemática de drogas

El compromiso de continuar avanzando en la búsqueda de soluciones efectivas al problema mundial de las drogas con un enfoque integral, equilibrado y multidisciplinario en el marco del pleno respeto a los derechos humanos y libertades fundamentales, fue uno de los puntos centrales de la resolución adoptada en el 44 Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos, que se realizó del 3 al 5 de junio en Asunción (Paraguay).
OEA

La resolución sobre “Derechos Humanos y Drogas; en la búsqueda de nuevos enfoques y soluciones”  fue promovida por Uruguay a través de su representante permanente en ese organismo internacional, Milton Romani; copatrocinada por Argentina; apoyada por Ecuador, México, Colombia y Guatemala y aprobada por unanimidad.

En dicha resolución se afirma que las libertades fundamentales  están directamente relacionadas con el derecho de las personas a vivir con dignidad, por lo que tienen como fin promover y lograr el bienestar de la persona, su inclusión social, su acceso a la justicia, a la educación y la salud junto a acciones preventivas para hacer frente a la delincuencia organizada transnacional y el fortalecimiento de las instituciones democráticas.

La OEA reafirma que las políticas de drogas deben contener una perspectiva transversal de derechos humanos, consistente con las obligaciones de las partes conforme al derecho internacional, así como también deben ser diseñadas e implementadas con un enfoque de género, con el fin de promover y lograr el bienestar de la persona su inclusión social, el acceso a la justicia y a la salud, entre otros.

Las políticas de drogas deben realizarse con el pleno respeto de las leyes nacionales y el derecho internacional, incluyendo el debido proceso, y de irrestricto respecto de  los derechos humanos, se establece en otra parte del texto aprobado.

Asimismo, la OEA insta a los Estados a que en sus políticas de drogas cumplan plenamente sus obligaciones de conformidad con el derecho internacional aplicable, en lo referente a  la prohibición de tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes, destacando en particular, la absoluta prohibición de la tortura, incluyendo, la Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura.

Por otra parte, también solicitó a la Comisión Interamericana de Mujeres (CIM) que continúe prestando atención a los efectos que pudieran derivarse de las políticas para enfrentar el problema mundial de las drogas para los derechos de la mujer.

Del mismo modo, solicitó a las Secretarías Ejecutivas de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, de la Comisión Interamericana de Mujeres y de la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas (CICAD), así como de otras áreas pertinentes de la OEA, que establezcan y fortalezcan su colaboración permanente incluso en lo referente al tema de la promoción y protección de los derechos humanos y las libertades fundamentales, los derechos de las mujeres, en la adopción de medidas

Uruguay promovió además otros cuatro proyectos de resolución finalmente aprobados por el pleno de la Asamblea General : "Prevención y reducción de la apátrida y protección de las personas apátridas en las Américas" (ad referéndum de Paraguay); otro "Contra la tortura y otros tratos o penas crueles inhumanos o degradantes";  un tercer proyecto acerca de la "Prevención y erradicación de la explotación sexual, tráfico y trata de niños, niñas y adolescentes"; y una cuarta  declaración sobre "Violencia y explotación contra la niñez".

Uruguay también copatrocinó y acompañó una serie de otros proyectos vinculados a derechos humanos que resultaron posteriormente aprobados.

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