Un hombre fue condenado por reiterados delitos de violencia doméstica, entre otros delitos

La Fiscalía Departamental de Ciudad de la Costa de 2º turno, representada por los fiscales Sandra Fleitas e Ignacio Arias arribó a un acuerdo abreviado que fue tramitado el día 18 de noviembre de 2024 por el Juzgado de Primera Instancia de Ciudad de la Costa de 1° Turno. En sentencia definitiva, se condenó a J.C.T como autor penalmente responsable de reiterados delitos de violencia doméstica agravados en concurso formal, con tres (3) delitos de lesiones personales y reiterados delitos de abuso sexual especialmente agravado en reiteración real, con un delito de tráfico interno de municiones, a la pena de seis (6) años y ocho (8) meses de penitenciaría. Asimismo se dispusieron las penas accesorias de suspensión del ejercicio de la patria potestad e inhabilitación para el ejercicio de funciones públicas y privadas y la reparación patrimonial de doce salarios a la víctima.
El Magistrado también dispuso que se decomisen las municiones y el vehículo automotor incautado del imputado. Y que se libre oficio al Ministerio de Relaciones Exteriores y a la Dirección Nacional de Migraciones por ser el imputado una persona extranjera, a los efectos de que por política migratoria se adopten las medidas del caso.
De la investigación realizada por la mencionada Fiscalía, surge que en marzo del 2022, la primera víctima radicó denuncia policial al imputado. Refirió que ambos mantenían una relación de pareja, conviviendo desde hacia un año y medio junto a los tres hijos de la víctima, todos menores de edad.
Desde el inicio, la relación de pareja se vio signada por violencia física, sexual, verbal, económica y psicológica del imputado. Relató la víctima que en varias oportunidades cuando ella no quería mantener relaciones sexuales él abusaba sexualmente de ella. La agredía físicamente asiduamente, llegando en una oportunidad, a fisurarle una costilla luego de una de las golpizas. También la obligaba a sacar préstamos en su propio beneficio. La amenazaba para evitar ser denunciado, además que el imputado tenía dos armas de fuego en la casa.
La víctima logró poner fin a las agresiones, concurriendo a la seccional para solicitar medidas cautelares para ella y sus hijos. Es de destacar que debido a la situación la víctima realizó tres intentos de autoeliminación, le retiraron la tenencia de sus hijos y continúa a la fecha en tratamiento con médico psiquiatra.
En el mes de octubre del 2023, la segunda víctima y denunciante comenzó una relación de pareja con el imputado. También en este vínculo existió violencia: refirió que la obligaba a mantener relaciones sexuales en contra de su voluntad, insultos, golpes de puño en el rostro y en las piernas con una madera y a cortarla con hojas de afeitar.. El 10 de enero de 2024 debió concurrir al centro de salud local por las lesiones infringidas, pero no pudo ser adecuamente valorada por la hinchazón que presentaba en algunas partes de su cuerpo. En ese estado de situación fue derivada a un hospital donde aún permanece internada. Fue el centro de salud quien radicó la denuncia y el Juzgado de Familia Especializado dispuso la requisitoria del imputado y las medidas cautelares de protección para ella. El relato incluía amenazas con arma de fuego.
Con fecha de 7 de diciembre de 2023 una tercera víctima quién mantuvo un vínculo de pareja con el imputado y convivencia desde el mes de noviembre, radicó denuncia policial contra el imputado por agresiones físicas y sexuales. Consignó haber recibido golpes de puño, patadas, quemaduras de cigarrillo, le prendió fuego a su cabello y llegó a apuntarla con un arma de fuego. También que la aisló de su entorno, impidiéndole mantener contacto con su familia y amigos, controlando además su forma de vestir y las comunicaciones a través de su teléfono celular. En este caso, además, y luego de que la víctima intentara culminar el vínculo, el imputado se retiró del hogar de la víctima llevándose todo el dinero que ella tenía ahorrado y su vehículo. A pesar de que se retiró del hogar, el imputado continuó acosándola por teléfono, por lo que por temor radicó la denuncia.
En el proceso se recabaron declaraciones de varios testigos quienes se ampararon en la calidad de testigos reservados por miedo hacia su integridad física por la violencia que despliega el imputado.
Se computó como agravantes la condición de ser mujer de las víctimas y como atenuante que el imputado admitió los hechos (condición para la celebración del juicio abreviado).
Nota: Este texto fue elaborado por la Unidad de Víctimas y Testigos de la Fiscalía para su difusión pública.