El Canciller uruguayo desarrolló intensa actividad en Ginebra, en reuniones ministeriales
El día 6 de diciembre el Ministro Almagro participó en el 60 aniversario de la Organización Internacional para las Migraciones, en que se examinaron las tendencias de los flujos migratorios, los nuevos desafíos y el rol de la Organización en apoyo a una migración ordenada y respetuosa de los Derechos Humanos.
El Canciller uruguayo destacó el marco migratorio nacional, el cual esta ajustado a los estándares internacionales, tales como la Convención Internacional sobre la protección de los derechos de trabajadores migratorios y sus familias. Destacó asimismo la valiosa cooperación recibida de la OIM desde un inicio, y mas recientemente, la colaboración destinada a contar con un perfil migratorio, en tanto instrumento dinámico y base para desarrollar políticas nacionales, así como a apoyar el combate a la trata de personas, el retorno de compatriotas y la labor integral de la Junta Nacional de Migración y su Consejo Asesor Consultivo, abarcando también la faceta de migraciones internas y los nuevos flujos de inmigración que recibe nuestro país.
El Ministro Almagro, entre otras cosas, expreso « La migración es un espejo que nos devuelve la verdadera imagen de nuestra sociedad y observando con atención encontramos imágenes muy reveladoras que nos llaman a combatir y a acabar con la exclusión y por tanto, con el modelo de sociedad que lo genera. ».
También mencionó que « Uruguay considera que integrar la perspectiva de los Derechos Humanos en las políticas migratorias y conexas es esencial, en especial en la coyuntura internacional actual de crisis financiero-económica y socio-política, dado que los migrantes constituyen parte de las poblaciones mas vulnerables. »
En otro orden, el día 7 de diciembre, el Canciller Luis Almagro participó en la Reunión Ministerial conmemorativa del 60 Aniversario de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, de 1951 y el 50 Aniversario de la Convención para reducir los casos de apatridia, de 1961, destacando la labor del ACNUR y el liderazgo del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados.
Ambos instrumentos siguen siendo « la piedra angular del régimen de protección internacional para estos dos grupos vulnerables ». Sin perjuicio de ello, el Canciller uruguayo subrayó que « la prioridad política de los miembros de la comunidad internacional debería seguir siendo la lucha contra las verdaderas causas de los desplazamientos forzados ».
Nuestra ley de refugio de diciembre de 2006, entre otras cosas, incorporó en la definición de refugiado la cuestión de género como uno de los motivos de persecución. Además incluyó « cualquier otra circunstancia que haya perturbado gravemente el orden público ».
Uruguay se comprometió puntualmente a contar con un procedimiento de determinación formal de la condición de apátrida, que conceda a las personas reconocidas como tales un estatuto consistente con los estándares internacionales. También se comprometió a fortalecer las capacidades de la Secretaría Permanente de la Comisión de Refugiados, encargada de realizar el primer análisis de elegibilidad y emitir una recomendación técnica, y por último a complementar los esfuerzos de reasentamiento solidario de refugiados iniciados en 2009, con un programa de reasentamiento rural, para facilitar las posibilidades de inserción local y autosuficiencia de aquellas personas con dicho perfil.
Fuente: MRREE
Dirección de Prensa
Montevideo, 08 de diciembre de 2011.
