Trasmisión

La trasmisión es la actividad de transportar energía eléctrica, mediante líneas de alta tensión (mayores a 72,5Kv) desde las centrales de generación hasta los centros de consumo.

Los requerimientos de las líneas de trasmisión generan un monopolio natural sin posibilidad de competencia. Sin embargo, las redes de transporte permiten viabilizar la posibilidad de un mercado competitivo. (Ver Generación y Comercialización Mayorista).

La Ley Nº 16.832 establece que la trasmisión (como servicio público) debe permitir el acceso no discriminado de terceros (generadores, distribuidores o grandes consumidores) a la capacidad de transporte de energía eléctrica de la red en las condiciones acordadas por las partes, de acuerdo a las normas jurídicas que le fueren aplicables y cumpliendo con las especificaciones mínimas de la reglamentación. El trasmisor, al igual que el distribuidor, cuenta con diversas facultades jurídicas para prestar debidamente el servicio, realizar el mantenimiento y reparar las redes existentes así como ampliarlas.

En Uruguay, la actividad de trasmisión es prestada por el ente estatal UTE. El Poder Ejecutivo prevé legalmente un régimen de tarifas máximas por la prestación del servicio de uso de la red.

El reglamento específico aplicable a esta materia es el Reglamento de Trasmisión de Energía Eléctrica (RT) que establece los derechos y obligaciones de las partes involucradas (trasmisores, usuarios, Despacho Nacional de Cargas), el acceso a la capacidad de trasmisión, la expansión del sistema de trasmisión, el régimen tarifario, criterios de diseño y desempeño mínimo del sistema, calidad del servicio de trasmisión, servidumbres y expropiación.

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