Ministerio de Relaciones Exteriores 
Más de 900 personas nacidas en el exterior se acogieron a la ley de nietos y obtuvieron nacionalidad uruguaya
La ley n.º 19362, conocida como ley de nietos, otorgó la ciudadanía uruguaya a 965 personas nacidas en el exterior que son nietas de ciudadanos nacionales. Entre enero de 2015 y mayo de 2018 se expidieron 385 cédulas de identidad en territorio uruguayo y 580 pasaportes en las oficinas consulares de la República. Para Cancillería, esta ley ayuda a la ampliación de la comunidad nacional, más allá de las fronteras territoriales.
A través de un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores informó que casi 1.000 personas, hijos de padre o madre (ciudadanos naturales) nacidos en el exterior, pudieron obtener la nacionalidad y la ciudadanía natural, al amparo de esta ley, que resuelve la problemática de la ley n.º 16021, del 13 de abril de 1989, que no les reconocía la calidad de nacionales y ciudadanos naturales.
El comunicado aclara que, si bien la ley n.º 16021 significaba un avance en cuanto a que clarificaba la definición de nacionalidad, presentaba un criterio restrictivo y discriminatorio, además de su carácter inconstitucional, que perjudicaba a aquellos descendientes de uruguayos que, habiendo nacido en el exterior, se sentían uruguayos y pretendían acceder a la nacionalidad uruguaya.
A través de la Dirección General para Asuntos Consulares y Vinculación, el Ministerio de Relaciones Exteriores realizó el trabajo de obtención de insumos y consultas a catedráticos de prestigio, a efectos de discutir acerca del proyecto que luego dio lugar a la ley n.º 19362. Esta iniciativa fue debatida y apoyada por la Junta Nacional de Migración, presidida por Cancillería.
Gran cantidad de uruguayos ya obtuvieron la doble nacionalidad, principalmente española e italiana, en su calidad de hijos o nietos de inmigrantes de estas nacionalidades que llegaron a Uruguay en los siglos XIX y XX. La gestión que llevan adelante el Ministerio de Relaciones y todos los organismos que forman parte de la Junta Nacional de Migración se basa en el objetivo general de garantizar los derechos fundamentales de las personas migrantes y mejorar su bienestar, que se traduce en acciones concretas que se realizan diariamente.
A través de la política de vinculación se trabaja para fortalecer el sentido de pertenencia e identidad nacional de los uruguayos que residen en el exterior, así como su integración a la vida nacional, a fin de transformar esta aspiración en un hecho. En tal sentido, esta ley ayuda a la ampliación de la comunidad nacional, más allá de las fronteras territoriales, base fundamental para el fortalecimiento de los lazos y el vínculo con el país.
Para la política migratoria actual, ha sido sustancial la creación y el desarrollo de un marco normativo, el fortalecimiento de la estructura institucional, así como la revisión y actualización de los procedimientos administrativos y prácticas institucionales, acorde a los principios que la orientan.
El trabajo permanente con la sociedad civil organizada, en Uruguay y en el exterior, así como la coordinación interinstitucional con diversos organismos públicos y con el Parlamento Nacional, siguen siendo fundamentales para la consolidación de esta política pública.