Arismendi estudia proyecto de centro juvenil en Fraile Muerto
Una asociación civil de Fraile Muerto —Cerro Largo— presentó al MIDES un proyecto para desarrollar un centro juvenil que atienda la situación de 500 jóvenes de la localidad y zonas aledañas. El objetivo es generar un espacio socioeducativo que garantice la continuidad y el seguimiento de los aprendizajes. La ministra Marina Arismendi elogió el proyecto y se compometió a estudiarlo.
La titular del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), Marina Arismendi, se reunió durante toda la jornada del lunes 20 de abril con organizaciones de la sociedad civil de Cerro Largo. Los encuentros se desarrollaron en las instalaciones de la Oficina Territorial del Ministerio en el centro de Melo.
Entre varias propuestas y planteos la jerarca destacó una, presentada por una asociación civil sin fines de lucro perteneciente a la localidad rural de Fraile Muerto, ubicada a 40 kilómetros de la capital de Cerro Largo. Consiste en la posibilidad de instalar un centro juvenil.
Las representantes de la organización explicaron a la ministra que allí existe una Casa Joven, pero que no garantiza la continuidad de la atención, ni el seguimiento que los jovenes necesitan para culminar sus cursos o proseguir estudiando en otros niveles educativos.
La meta es reunir allí a adolescentes y jóvenes de la localidad, pero también de zonas aledañas —Ramón Trigo, Quebracho, Tres Islas y Cerro de las Cuentas, entre otros lugares— los que representan 478 personas de las cuales 124 se encuentran fuera del sistema educativo.
Fraile Muerto ya cuenta con la intervención del programa Jóvenes en Red del Instituto Nacional de la Juventud, para quienes no estudian ni trabajan y están en situación de exclusión social. Justamente, su director, Santiago Soto, participó de la reunión y consideró viable la posibilidad de concreción del proyecto.
"Son novedosas este tipo de iniciativas. En Fraile Muerto pasan cosas que vale la pena mirar y que suceden hace décadas. Es un círculo virtuoso entre la sociedad civil y el apoyo que tiene del gobierno en los distintos proyectos", dijo, quien habló de la localidad como el "interior del interior".
Soto explicó que existe la constante preocupación por generar dispositivos estables, impulsar la generación de actividades y promover la continuidad, con el instituto como articulador de las políticas de juventud y su concreción en el territorio.
"La experiencia es muy buena en el sentido de ir generando redes. Existe Jóvenes en Red, Centro MEC, un conjunto de dispositivos del Estado en conjunto con una sociedad civil que demanda", apreció. También indicó que este proyecto puede ser un piloto experimental para desarrollar en otros espacios. "Tener una sociedad civil organizada, potente y demandante es una condición necesaria para llevar a cabo políticas de juventud efectivas", reflexionó.
La ministra Arismendi enumeró algunos de los encuentros en que participó, por ejemplo, con organizaciones que trabajan en clubes de niños, en residenciales de adultos mayores. También se reunió con el sindicato de domésticas.
Según indicó, varios temas se repiten en todo el país. Unos tienen relación con el Sistema Nacional Integrado de Cuidados, es decir primera infancia, adultos mayores que no son autoválidos y personas con discapacidad con un grado importante de dependencia.
Por otro lado, enumeró tres temas: trabajo protegido y promovido —el ministerio lanzará una nueva edición de Uruguay Trabaja, por lo que sus autoridades se reunieron con cooperativas y monotributistas sociales—. Otro tema implica a la salud mental, vinculado particularmente con los tratamientos. El último gran tema es el vinculado con la promoción y el desarrollo de la atención a primera infancia, escolares, adolescentes y jóvenes en las pequeñas localidades, como es el caso del proyecto de Fraile Muerto.