Banco Interamericano de Desarrollo incrementa apoyo contra la criminalidad
El BID ampliará su línea de crédito destinada a seguridad ciudadana con la finalidad de apoyar a los gobiernos que lo integran. Su presidente, Luis A. Moreno, sostuvo que uno de los principales desafíos que enfrenta es frenar la creciente ola de criminalidad y violencia y alcanzar un mayor nivel de seguridad ciudadana en la región. También enfatizó que esto es posible y agregó que la información, gestión integral y cooperación para el aprendizaje son muy importantes.
En un almuerzo de trabajo realizado en el restaurante Rara Avis el lunes 19 de marzo el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno, y el vicepresidente de la República, Danilo Astori, compartieron con los presentes, apreciaciones sobre esta temática.
Astori expresó que para un gobierno, la seguridad ciudadana es clave y que muchas veces se siente estar en un “laberinto sin salida”, como se le denomina al tema en la exposición de Moreno.
Reconoció que Uruguay no está fuera de esta problemática, que afecta a todos los países de la región pero enfatizó que es importante identificar las condiciones sociales en que se originan los problemas de seguridad para luego buscarles soluciones en todos los planos.
"Los gobiernos deben ser capaces de construir infraestructuras, capacidades y ámbitos de recuperación para quienes incurrieron en conductas desviadas, sin abandonar a los que no lo hicieron que también deben poder acceder a las oportunidades que les brinda la vida", aseguró.
Por su parte, Moreno informó que según la experiencia recabada al visitar los países latinoamericanos y del Caribe, la preocupación por la seguridad ciudadana es un tema generalizado. Según destacó, por esta razón el BID decidió incrementar su línea de crédito destinada a la lucha contra la inseguridad ciudadana.
En la opinión del represenatnte del BID este problema puede mejorarse con un abordaje serio que involucre tres aspectos: prevención; capacitación y fortalecimiento institucional, que incluya un marco de cooperación local y regional.
Moreno informó que durante los últimos 15 años se aprobaron cerca de U$S 300 millones en un conjunto de doce programas que incluyeron múltiples cooperaciones técnicas en seguridad ciudadana. Actualmente se preparan 9 proyectos más, en siete países adicionales que involucrará un monto cercano a los U$S 330 millones.
Aseguró que América Latina y el Caribe están capacitados para concretar estrategias efectivas en prevención del crimen y a modo de ejemplo mencionó experiencias exitosas en ciudades como Medellín —otrora considerada una ciudad muy peligrosa—, o Diadema, una ciudad brasileña que disminuyó admirablemente el índice de delincuencia. En ambos casos, se logró reducir radicalmente el número de homicidios, por medio de estrategias culturales y sociales introduciendo además, una nueva relación entre la policía y la comunidad.
El BID le otorgó al Uruguay su primer préstamo en seguridad ciudadana, que se destinó al financiamiento de un Observatorio del Crimen, montado para incrementar la eficacia en prevención del delito.