Cánepa y Kreimerman defendieron desarrollo minero ambientalmente sustentable en Uruguay
En la apertura de la “Conferencia sobre Minería y Desarrollo Sostenible en Uruguay, visiones y experiencias nacionales e internacionales” Cánepa afirmó que se debe aprender de la experiencia internacional para compatibilizar el desarrollo productivo, cuidando el medio ambiente, objetivo buscado por el proyecto de minería de gran porte. Kreimerman recordó que el desarrollo minero fue acordado en 2011 por todos los partidos.

Entre el 15 y 17 de julio se desarrolla la “Conferencia sobre Minería y Desarrollo Sostenible en Uruguay, visiones y experiencias nacionales e internacionales” en el Centro de Eventos y Reuniones del Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU). El objetivo es conocer el potencial, los retos, los desafíos y las experiencias del desarrollo minero de diferentes países como insumo para el diseño de las políticas mineras y del desarrollo sostenible del Uruguay.
En la apertura participaron el prosecretario de la Presidencia de la República y presidente del Consejo Directivo de la Agencia Uruguaya de Cooperación Internacional, Diego Cánepa, el ministro de Industria, Energía y Minería, Roberto Kreimerman, el director nacional de Medio Ambiente, Jorge Rucks, y el coordinador residente ad interim del Sistema de Naciones Unidas, Egidio Crotti.
Diego Cánepa resaltó la importancia con que el Gobierno considera este tipo de evento con el fin de debatir sobre la industria minera. Agregó que el desarrollo, incipiente en el país, requiere del conocimiento de países que tienen experiencia en la materia, como Noruega, Chile, Argentina, Australia y Estados Unidos.
“Pensar en el Uruguay de puerto, pradera y frontera es pensar en el Uruguay del siglo XIX. Hoy tenemos yacimientos mineros importantes y, a su vez, la propia tecnología ha generado que la extracción de minerales tenga una rentabilidad económica. Lo que se debe hacer es entender cuál es la mejor forma de desarrollarse de manera responsable”, afirmó Cánepa.
En la oportunidad, acotó que el Gobierno está abocado a trabajar para encontrar mejores instrumentos y políticas públicas e implementar una minería responsable con desarrollo industrial. Explicó que tener un nuevo marco jurídico a través de la Ley de minería de gran porte —a estudio en la Cámara de Diputados del Parlamento— y el control que realiza la Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA) son elementos esenciales para esto.
“No tenemos otra forma que explotar inteligentemente, de manera sustentable y sostenible en el tiempo, los recursos de que disponemos para mejorar la vida de los ciudadanos tanto desde el punto de vista ambiental como económico. Está en nosotros generar las condiciones para tomar las mejores decisiones de algo a lo que no podemos renunciar como lo es el desarrollo del Uruguay”, concluyó Cánepa.
El ministro Kreimerman remarcó que el debate sobre minería de gran porte comenzó en 2011 cuando el Presidente Mujica convocó a una comisión multipartidaria de análisis y, el 22 de diciembre, todos los partidos firmaron el acuerdo que estableció un marco estratégico y político para el desarrollo minero en Uruguay. “Fortalecer y capacitar al Estado, además de brindar conocimiento a la sociedad, son los temas centrales que se deben analizar”, expresó.
El titular del MIEM subrayó que la minería es productiva para el país porque diversifica productos, adquiere una nueva cadena de valor, además de crear un impuesto adicional y tener un fondo intergeneracional para hacerlo sustentable y sostenible.
Organización de la Conferencia
La “Conferencia sobre Minería y Desarrollo Sostenible en Uruguay, visiones y experiencias nacionales e internacionales” es organizada por el programa conjunto “Fortalecimiento del MIEM, MVOTMA para una minería responsable en el Uruguay”, la Agencia Uruguaya de Cooperación Internacional (AUCI), agencias, fondos y programas del sistema de ONU, PNUMA y UNESCO y la Universidad de la República.
Serán presentadas exposiciones sobre las experiencias en la temática por parte de políticos, expertos de empresas privadas, consultores de ONU y académicos de las universidades de la región.