Seguridad en liceos 
Comunidad Educativa Segura intervino este año en cuatro casos de hurto frente a 44 en 2010
El programa Comunidad Educativa Segura del Ministerio del Interior presentó un informe comparativo entre las intervenciones registradas en los primeros tres meses del año lectivo 2010, con las realizadas durante el mismo período de este año. En delitos contra la propiedad, el año pasado el programa registró 44 hurtos. Este año intervino en seis. El disturbio, la infracción más común, cayó de 55 en 2010 a 18 en 2011.
El resumen de prensa publicado por el Ministerio del Interior en su página Web informa que, entre el 1º de marzo y el 31 de mayo, el programa Comunidad Educativa Segura intervino en 1.516 infracciones generales, de las cuales constató una “situación problema” en 29 ocasiones. Entre marzo y mayo de 2010 se intervino 2.701 veces y se registró problemas en 140 ocasiones.
En la información se distingue entre “intervención” y “situación problema”. El coordinador del programa Juan Carlos Vázquez, explicó que la situación problema implica la confección de un parte, donde se determina una situación anómala, frente a la intervención, de carácter más general.
El informe hace foco en los hurtos en general. Durante 2010 se registraron tres infracciones de hurto asociadas a daños, cuatro hurtos asociados a disturbios, dos asociados con drogas y 35 rapiñas, totalizando los 44 casos constatados. Hasta el 31 de mayo de 2011 se registraron únicamente seis rapiñas.
Disturbios, la infracción más observada en liceos
Durante los primeros tres meses del año lectivo 2010, el programa Comunidad Educativa Segura trabajó en 55 disturbios. En el mismo período de este año registró 18 casos. Vázquez refirió que estos casos incluyen episodios de violencia y peleas que se caracterizan por enfrentamientos entre dos centros de enseñanza.
El jerarca explicó que cuando las autoridades cuentan con información previa al hecho –en muchos casos por amenazas anteriores entre los estudiantes- se realiza un trabajo conjunto con la Jefatura de Montevideo, con el objetivo de minimizar los daños.
Otra clase de enfrentamientos refiere a ex alumnos o juventud problemática de la zona que se concentra en la entrada o salida de los centros de estudio. En estos casos ocurren episodios de violencia que son desactivados a través de equipos del programa que concurren al lugar.
También existen las provocaciones intra liceos, entre barras de dos clases, las que se intentan desarticular a través de la mediación de los propios compañeros. Otra hecho que puede ocurrir que un estudiante agreda a una persona externa del entorno liceal.
La seguridad en el liceo descansa en tres soportes fundamentales: la familia, los docentes y por último la policía. Estos tres órdenes deben actuar para desactivar a priori estas situaciones de violencia, indicó Vázquez.