Convoy de 22 vagones cisterna asegura más capacidad de transporte y seguridad operacional
El convoy de 22 vagones ya provee de combustible a la planta de Durazno desde la refinería de La Teja. La tensión que generó en la cadena logística el crecimiento económico registrado en el interior del país desde el 2005 exigió que ANCAP realizara una inversión de 3.750.000 dólares en esta adquisición. Las unidades aportan mayor capacidad de transporte, eficiencia, seguridad operacional y cuidado del medio ambiente.
“El aumento de la demanda de combustible en el interior desde 2005, debido al crecimiento económico, generó una tensión en la cadena logística”, recordaron el gerente de Logística de ANCAP, Eduardo Lurner, y el jefe de plantas operaciones, Álvaro Balarini, para justificar la reciente adquisición de un convoy de 22 vagones cisterna.
En una visita que realizó un equipo de periodista y fotógrafo de la Secretaría de Comunicación a la refinería de La Teja para conocer las unidades, los funcionarios informaron que estas fueron adquiridas mediante un proceso de licitación pública internacional a la firma Random, de Brasil.
Con anterioridad, el vicepresidente de ANCAP, Germán Riet, había anunciado a esta secretaría que la compra del convoy demandó una inversión de 3.750.000 dólares.
Cada vagón tiene una capacidad de 51 metros cúbicos —frente a los 31 metros cúbicos de las antiguas unidades que datan de la década del ochenta— y son duales, es decir, pueden cargar por arriba (top loading) como hasta el presente, y por abajo (carga ventral o bottom loading), que es el sistema más moderno. Estas características —aseguraron— significan un “salto tecnológico considerable”.
En los vagones nuevos, “el tanque es la estructura”, mientras que las anteriores unidades se componen de un tanque encima de un chasis, explicaron los funcionarios.
Riet había destacado que, además de una mayor capacidad de transporte, los vagones cisterna aportan mayor eficiencia y ahorro de costos, seguridad operacional y salud e higiene, en este caso porque se elimina la absorción, por los operarios, de los vapores del combustible. Las unidades también presentan ventajas en el cuidado del medio ambiente, debido a que se evita el “goteo” en la carga y descarga.
En la actualidad los vagones ya fueron incorporados al transporte de gasolinas y gasoil a la planta del ente en Durazno. ANCAP aguarda que, luego de definir algunos aspectos operativos, próximamente hagan lo propio hasta Treinta y Tres para, desde allí, proveer a las estaciones de servicio locales y del área de influencia.