Desde 2003 Uruguay brindó refugio a 134 personas y aprobó el reasentamiento de 47
El director de DDHH del MRREE, Federico Perazza, informó sobre el II Encuentro CONARES (refugiados en Sudamérica), donde los países presentaron datos actuales de legislación y mecanismos para otorgar refugio. También se analizó el "reasentamiento solidario", fenómeno nuevo en el cual Uruguay aplicará una experiencia piloto a nivel rural. Desde 2003, el país refugió a 134 personas y reasentó a 47, en su mayoría colombianos.
Federico Perazza explicó a la Secretaría de Comunicación los temas abordados en el II Encuentro CONARES (Comisiones Nacionales de Refugiados) llevado a cabo en Montevideo entre los días 30 y 31 de mayo. Participaron todos los presidentes e integrantes de las comisiones de refugiados de los países del MERCOSUR y Estados Asociados, y los representantes de la Agencia de la ONU para Refugiados (ACNUR) en América latina.
En la agenda de trabajo se analizaron temas relacionados con refugiados y reasentados. En el primer caso, se abordaron avances y desafíos para la protección internacional de refugiados y solicitantes de asilo en la región, y cada país efectuó una presentación sobre su situación y legislación particular, los mecanismos para otorgar asilo y experiencias de integración local en contextos urbanos.
Con respecto a los reasentados, Perazza explicó que se analizó el "reasentamiento solidario", experiencia básicamente latinoamericana que ha logrado proyectarse en la agenda de la ACNUR a nivel internacional. El reasentado es aquella persona que por distintos motivos no se adaptó al país que originariamente le concedió el refugio y solicita ser reasentado en un tercer país.
"Es una experiencia innovadora surgida para apoyar a Ecuador, que en los últimos años recibió cerca de 56 mil refugiados, de los cuales el 99 % son colombianos", sostuvo el jerarca. Argentina, Uruguay, Brasil y Chile son los países que en estos momentos están atendiendo las necesidades de esos refugiados de Ecuador.
Además estimó positivo este encuentro en ese sentido, porque sirvió para conocer criterios y acciones conjuntas a llevar adelante, ante la aparición de este fenómeno que es nuevo, y necesita de respuestas colectivas.
Refugiados y reasentados en Uruguay
Perazza informó que desde el año 2003 a la fecha, Uruguay concedió refugio a 134 personas y aprobó el reasentamiento de 47, básicamente familias con hijos.
Asimismo señaló que a mediados de este año comenzará a aplicarse una experiencia piloto para reasentar refugiados en el ámbito rural, dirigido especialmente a personas que vienen de provincias rurales —básicamente colombianos—. Para ello, se trabaja coordinando acciones con los gobiernos departamentales, MEVIR, centros educativos y sanitarios.
Los motivos que llevan a una persona a solicitar refugio son, generalmente, temor fundado por persecuciones políticas, ideológicas, étnicas o raciales, lo que hace que la persona sienta que su vida está en peligro. Para solicitar refugio, la persona debe encontrarse físicamente en el país y presentarse ante la Comisión de Refugiados integrada por varios ministerios y organizaciones.
Una vez que se le concede el refugio, la persona cuenta con todos los derechos y obligaciones de un ciudadano legal, y podrá hacer uso de todos los servicios que ofrece el país. Primero se le extiende una cédula temporal y luego otra definitiva, que, a diferencia de lo que ocurre en otros países, no presenta ningún tipo de estigmatización.
Sostuvo que "algunos países explicitan la condición de refugiados en el documento de identidad y eso puede estimular a discriminaciones". Resaltó que Uruguay está a la vanguardia en este tema.
Los que solicitan refugio en la región son básicamente colombianos, explicó Perazza, y un pequeño porcentaje de africanos (zenegaleses, nigerianos o congoleños).
Perazza dijo que Ecuador es el país que más refugiados ha reconocido a nivel internacional y en la región. Agregó que 1.200 personas por mes cursan esa solicitud. El género de los que solicitan refugio o reasentamiento varía, pero se observan muchos casos de familias monoparentales (mujeres sin pareja y con hijos). "Uruguay está privilegiando ese tipo de protección porque entiende que es la población más vulnerable", aseguró el jerarca.