Escuela Nº 86 de Libertad reanudará las clases el martes 23 de abril
El director de Prevención de la Salud del CEP, Rolando Viotti, explicó que actualmente la Escuela N.º 86 de Libertad, luego de los casos de gastroenterocolitis que surgieron en la pasada semana, se encuentra —desde el punto de vista sanitario y de control epidemiológico— en vías de culminar el proceso de contención de la enfermedad. El martes 23 de abril se reanudarán las clases en el centro educativo.
Viotti señaló a la Secretaría de Comunicación que en la Escuela N.º 86 hay 125 niños afectados y 7 adultos, entre los que se encuentra el director de la institución. En tal sentido, informó que todos presentan una evolución buena, prácticamente sin síntomas o aún con un leve dolor abdominal, pero no fue necesaria la internación de ninguno de los enfermos. Además, no se detectaron nuevos casos de personas con síntomas.
El director dijo que los primeros afectados fueron 40 personas. Ante esta situación, el Programa de Alimentación Escolar de Primaria envió a una especialista en química a la escuela para que tomara muestras de alimentos, manos de manipuladores, lugares estratégicos, como canillas o utensilios donde pudiera haber alguna contaminación. Por su parte Salud Pública —quien recibió la notificación inmediatamente— hizo los cultivos de los alumnos que estuvieron afectados.
Viotti recordó que la escuela N.º 86 es de tiempo completo y atiende en su comedor a casi 400 niños. En tal sentido, el contagio es casi inevitable, ya que “los alumnos volvían no del todo curados, sin haber culminado el período evolutivo, lo que motivó un recontagio, porque los niños no tienen el hábito de la higiene de manos incorporado”, relató el director de prevención de salud de Primaria.
Por tal motivo, es que se tomó la decisión de cerrar la institución educativa por el período de incubación de la enfermedad —7 días— para así evitar la situación de recontagio. De esta manera, el día martes de la próxima semana la escuela reabrirá sus puertas de manera normal.
Viotti dijo que como médico escolar nunca se quiere tomar la decisión de cerrar una escuela, ya que no solo se afecta al niño a nivel educativo, sino también en el aspecto social, ya que es el lugar de contención y alimentación de los niños. En este caso, dijo que acompañó la medida del Ministerio de Salud Pública por ser la única forma de poder dominar la situación rápidamente.
Agregó que sigue sin conocerse el origen del foco de la enfermedad, ya que “en el proceso de alimentación, desde la producción del alimento, el fraccionamiento, el envasado y la puesta en la mesa, existen muchas etapas y actúan muchas manos que pueden estar contaminadas”. De todas formas las investigaciones continúan, a través de nuevas tomas y cultivos en la escuela.
Viotti destacó la importancia del trabajo conjunto entre docentes, funcionarios de la escuela, Salud Pública, Intendencia y padres, en la higiene del local. Esta situación demostró que “cuando las fuerzas vivas actúan juntas —Intendencia, Ministerio, Primaria y sociedad civil— es posible actuar y generar una contención rápida de la situación”, afirmó el entrevistado.