Estación de transformación de energía de Salto Grande duplicó su capacidad para mejorar el servicio
La represa de Salto Grande y UTE ampliaron la estación de transformación con nuevo equipo que convierte 500 kilovoltios a 150 kilovoltios. La obra, de 10 millones de dólares, responde a una demanda creciente de energía en la zona norte del país. Casaravilla recordó que el cambio de la matriz energética requiere de la modernización de las subestaciones y que entre 2010 y 2019 UTE habrá invertido unos 3.000 millones de dólares.

Casaravilla explicó a la Secretaría de Comunicación Institucional que esta inversión permitirá que el sistema de transmisión quede preparado para los próximos 30 años y, además, consolidará el anillo de transmisión de alta tensión de la zona norte del país, una serie de obras que incluye la línea entre Rivera y Artigas de 150 kilovoltios ya construida, la línea que se está comenzando a construir entre Melo y Tacuarembó, y una que se levantará en 2018 de 500 kilovoltios entre Tacuarembó y Salto.
La energía se produce con una tensión de 500 kilovoltios. Debe transformarse en niveles de tensión para que pueda llegar a los hogares. La primera etapa de transformación es de 500 kilovoltios a un valor intermedio de 150 kilovoltios. La estación de Salto contaba con un transformador de 250 megavolt/amper (MVA) de capacidad de transformación en dos niveles de tensión: 500 kilovoltios a 150 kilovoltios.
Fue inaugurado un transformador que duplica la capacidad de transformación de la energía, debido a la necesidad de una demanda creciente. En el norte del país, además, se generaron diversos proyectos eléctricos, ya sea por energía eólica y fotovoltaica que a su vez se debe transmitir en sentido inverso.
La incorporación de esta infraestructura implicó variadas obras de ingeniería civil, montajes electromecánicos, modificaciones y ampliaciones de los sistemas de comunicaciones, protección y control. Con este transformador de potencia y las obras asociadas, se refuerza significativamente el sistema interconectado nacional y mejora la confiabilidad de la zona norte de la red de alta tensión de UTE, consideró Casaravilla.
Casaravilla explicó que las subestaciones requieren de instalaciones que deben modernizarse. En esa línea UTE readecuó 12 subestaciones de 150 kilovoltios en el área norte. Afirmó que, por tanto, la calidad del servicio del norte del país, en lo que refiere a alta tensión, mejoró sustancialmente en los últimos meses.
Casaravilla resaltó que estas obras se inscriben dentro de las acciones que se realizan desde UTE para la generación, transmisión, distribución y comercialización, con un plan de inversiones que entre 2010 y 2019 será de 3.000 millones de dólares como empresa pública, y contó con inversiones privadas de instalación de parques eólicos, fotovoltaicos y de generación de biomasa unos 3.600 millones de dólares adicionales.