Experiencias locales exitosas y acuerdo con Brasil alientan crecimiento de Acuicultura
Se encuentra en marcha un acuerdo suscripto el año pasado entre Uruguay y el país vecino que promueve la cooperación y complementación técnica en la utilización productiva del surubí. También se estudia replicar proyectos brasileños de acuicultura en embalses de río, en Artigas y en la cuenca de Laguna Merin. En 2010, el esturión criado en cautiverio fue una de las diez especies más exportadas del país.
El director general de la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (DINARA), Daniel Gilardoni, indicó a la Secretaría de Comunicación que la repartición a su cargo está trabajando en la acuicultura (cultivo de especies acuáticas, vegetales y animales).
Adelantó que, en cooperación con Brasil, se encuentran en etapa de estudio las experiencias exitosas llevadas adelante en embalses de río, en el estado brasileño de Mato Grosso do Sul, y cómo las mismas pueden aplicarse en nuestro país, en Artigas y en la cuenca de la Laguna Merin.
En ese sentido, mencionó, además, que el ex mandatario brasileño Luis Inácio Lula da Silva y el presidente José Mujica suscribieron, el año pasado, un acuerdo, que está en marcha, que promueve la cooperación y complementación técnica en la utilización productiva del surubí.
Experiencias locales exitosas
El jerarca recordó en términos elogiosos el caso de un emprendimiento privado en Río Negro con el esturión, donde se logró triplicar la producción de esa especie. Al punto que en 2010, el esturión figuró en los registros de la DINARA como una de las diez especies de mayor valor exportada. Fue la primera vez que una especie de acuicultura apareció en el ranking de Uruguay.
Asimismo, destacó que este año se instaló una empresa con moderno equipamiento para la producción de carne de esturión y caviar para la exportación en la zona de San Gregorio de Polanco (Tacuarembó), en el lago Rincón del Bonete, en el río Negro.
“La acuicultura tiene distintos ramales y estamos trabajando en varias áreas para el desarrollo de la acuicultura”, afirmó Gilardoni. A modo de ejemplo, citó que en la Estación de DINARA en Cabo Polonio (Rocha), hoy funciona una moderna planta de maricultura (cultivo de organismos marinos para productos alimenticios) donde se ha logrado con éxito la reproducción del lenguado en cautiverio y en engorde.
Mucho para avanzar
El entrevistado dijo que esa experiencia se encuentra en las etapas finales del proceso con el objetivo de trasladarla al sector privado para lograr captar su interés en emprendimientos productivos.
Por otra parte, la DINARA, desde el Centro de Investigaciones Pesqueras y Piscicultura (CIPP), en Salto, proporciona a particulares semillas (peces de pequeño tamaño cuyo peso oscila entre los 10 y los 40 gramos) de bagre negro, pejerrey y carpas, para la siembra en cuerpos de agua particulares.
Consultado sobre la posibilidad de complemento con otras tareas rurales que presenta esta actividad no tradicional, Gilardoni apuntó que se trata de una cría extensiva que rinde pocos kilos de hectárea de tajamar y no todos los tajamares son adecuados. No obstante, empieza a haber interés en el área, reconoció.“La acuicultura es un área de oportunidades donde hay seguramente hay mucho para avanzar, quizás no a los mismos niveles de otros países pero es la única manera de aumentar la producción pesquera de las naciones porque la pesca silvestre está en un punto máximo de explotación y no puede crecer más”, sostuvo.