Ferreri aseveró que nuevo sistema tributario logró una mejor cohesión y equidad social
El director de la DGI, Pablo Ferreri, reseñó la evolución del sistema fiscal nacional desde 2002 a la fecha, resaltando que el nuevo sistema tributario logró una mejor cohesión y equidad social. Al respecto indicó que se eliminaron 14 impuestos, "se redujo el peso de los indirectos y aumentó el de los directos". “El nuevo diseño cumple los objetivos de eficiencia, equidad, flexibilidad y suficiencia”, aseveró
Con motivo de la segunda consulta regional sobre Justicia Económica, Ecológica y de Género en América Latina, el 16 de agosto, se desarrolló el panel: “Avances y desafíos sobre la Justicia Tributaria y la Justicia Social en Uruguay”. Participaron el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Eduardo Brenta, el director de la Dirección General Impositiva, Pablo Ferreri, la representante de Development Alternatives with Women for a New Era, Nicole Bidegain y la representante de DECON FCS, Universidad de la República, Florencia Amábile.
Ferreri se refirió al impacto redistributivo del sistema tributario uruguayo a partir de las interrogantes: ¿qué se ha logrado? ¿cómo se puede avanzar? El jerarca estructuró su presentación en cuatro ítems específicos: contexto en el cual se ubica el país para afrontar una nueva fiscalidad; aspectos de la fiscalidad del lado de los ingresos; aspectos de la fiscalidad del lado de gastos públicos y desafíos pendientes.
Sobre el contexto regional se refirió a que si bien Latinoamérica no es la zona más pobre, sí es la región con mayor desigualdad y con mayores inequidades, con una presión tributaria por debajo del 20 % o 15 % del Producto Bruto Interno (PBI) en impuesto indirectos y en el entorno del 5 % en impuestos directos. “Uruguay dentro de la comparación regional sale bien parado, pero no deja de ser desigual”, aseveró Ferreri.
Al respecto dijo que "Uruguay entre 2005 y 2007 afrontó al desafió de comenzar una nueva fiscalidad tanto del lado de ingresos como de egresos, pues hacía 35 años que no experimentaba un nuevo diseño integral del sistema tributario". “Un diseño que persegue objetivos de eficiencia, equidad, flexibilidad y suficiencia”, resaltó.
Reafirmó la importancia de recaudar de manera más justa y alterar lo menos posible las decisiones económicas. Algunas medidas que resaltó fueron: eliminar 14 impuestos, reducir los impuestos indirectos y aumentar los impuestos directos que pasaron, en el Uruguay, del 25 % a 37 %. “Es una clara demostración de equidad que tiene el nuevo sistema tributario. Pasamos de un sistema fiscal regresivo a progresivo con estímulo a la inversión productiva (en el siglo XX era inferior a la tasa de Haití con un 10 % a 15 % del PIB y ahora está en un 25 %) y con pago de salarios decentes”, agregó Pablo Ferreri.
“El 80 % de la población tenía el 50 % de los ingresos y pagaba el 60 % de los tributos. Hoy por hoy eso fue alineado y quienes tienen más pagan más”, subrayó el director de DGI.
También puntualizó que el gasto público fue modificado en nuestro país y está orientado a corregir situaciones de inequidad a partir de la consideración de los ciudadanos como sujetos de derechos. “Uruguay tenía un gasto social en el 20 % del PIB y creció a 25 %”, sostuvo. Sobre desigualdad destacó que el Índice de Gini se encuentra en el nivel más bajo de los últimos 30 años. “Los ingresos más altos tienen un porcentaje de un 11,2 % más que los ingresos más sumergidos, antes esa cifra era de un 18 %”, informó.
Desafíos
“Evolución del gasto público con prioridad social y con una presión fiscal correcta distribuyendo con equidad y cohesión social” es el desafío de la fiscalidad según el director de la DGI, Pablo Ferreri.