Gobierno focaliza en combate a contrabando, educación y acceso a clínicas antitabaquismo
El Gobierno profundizará las medidas en la represión al comercio ilícito de cigarrillos; apostará al sistema educativo como herramienta de toma de conciencia y garantizará el acceso a clínicas de cesación del hábito. El titular de Salud, Jorge Basso, dijo que la baja del consumo de tabaco en los jóvenes y el apoyo internacional en litigio contra tabacalera demuestran el éxito de las políticas implementadas.
En el marco de la presentación de resultados de la Encuesta Mundial de Tabaquismo en Jóvenes 2014 realizada en Uruguay, que revela una baja sustancial del número de jóvenes que consumen tabaco, el ministro de Salud Pública, Jorge Basso, dijo que datos tan alentadores implican nuevos desafíos en la política antitabaco para las nuevas generaciones.
Aseguró que es la voluntad del Presidente de la República, Tabaré Vázquez, seguir trabajando en la reducción del consumo tabaco. Entre las acciones a profundizar se destaca un mayor combate del comercio ilícito (contrabando) de este producto y sus derivados, lo que implica una mayor coordinación institucional con la Dirección Nacional de Aduanas, con la Dirección General Impositiva (DGI) y con el Ministerio del Interior.
De igual manera se insistirá en la educación; se trabajará en la órbita del sistema educativo y en la promoción de buenos hábitos, además de brindar información sobre los daños en la salud que produce consumir tabaco. Estas acciones implican, además, atender aquellas situaciones de jóvenes que están fuera sistema y atraviesan condiciones de vida más deficitarias. Para ello se utilizarán herramientas de inclusión y el apoyo de los medios de comunicación para mostrar los perjuicios que causa consumir tabaco.
Asimismo se trabaja para que desde el Sistema Nacional Integrado de Salud se sigan dando respuestas a quienes quieren dejar de fumar (cesación del hábito) con el acceso a policlínicas de tabaquismo en los prestadores, instancia que está dentro del paquete de prestaciones obligatorias del seguro de salud (incluyendo el suministro de medicación en los casos que sea necesario).
En otro orden, el ministro Basso anunció que en breve se dará a conocer un estudio sobre los costos (en vida y recursos monetarios) que la sociedad tiene que asumir sobre las personas que, si bien tienen la libertad de fumar, después requieren asistencia y tratamiento ante el desarrollo de patologías.
Basso ejemplificó la situación diciendo que el consumo de tabaco desencadena o complejiza diversas enfermedades vinculadas a distintos tipos de cáncer; patologías cardiovasculares (isquémicas como infartos, accidentes cerebro-vasculares e insuficiencia periférica vascular); patologías respiratorias e inclusive la incidencia del tabaco en el nacimiento de niños con bajo peso, lo que repercute en su crecimiento y desarrollo, y en la mortalidad infantil.
También se refirió al litigio que Uruguay tiene con la tabacalera Phillip Morris. Dijo que se sigue de cerca el diferendo y aludió al apoyo internacional que nuestro país viene captando.
En tal sentido mencionó como ejemplo el respaldo explícito de Estados Unidos y de varias organizaciones no gubernamentales que trabajan en línea con la Fundación Bloomberg, cuyos representantes lo manifestaron a la delegación uruguaya que concurrió a Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos) donde Uruguay recibió una distinción por su política antitabaco, y que incluyó dinero para la campaña de combate.