Gobierno observa alto acatamiento a la normativa aplicada para la preservación de la cuenca del río Santa Lucía
Un año después de la delimitación en la cuenca del río Santa Lucía de una zona “buffer” o de exclusión de laboreo, cría de animales y aplicación de agroquímicos, se observa un alto acatamiento por parte de los productores. Así lo informó el titular de la Dirección Nacional de Medio Ambiente, Alejandro Nario, quien agregó que las 11 medidas puestas en marcha en el área son revisadas por el Gobierno para su actualización.
El Gobierno de Tabaré Vázquez revisa las 11 medidas de control de la degradación ambiental de la cuenca hidrográfica del río Santa Lucía definidas en 2013. La evaluación procura identificar logros obtenidos y posibles detalles por ajustar, según explicó Nario.
Destacó, además, la medida número 8, que definió la instalación en la cuenca de una zona de amortiguación o buffer, sin laboreo de la tierra ni uso de agroquímicos, de 40 metros en ambas márgenes de los cursos principales de los ríos Santa Lucía y San José, de 20 metros en los afluentes de primer orden y de 100 metros en torno a los embalses.
En el marco de la primera reunión del Sistema Interdepartamental de Gestión Compartida de la Cuenca del Río Santa Lucía (sistema GCSL), realizada el jueves 20 en Florida, Nario informó que poco más de un año después de comenzar a aplicarse tal medida se observa un alto acatamiento por parte de los productores de la zona.
Comentó que, más allá del margen de error de las imágenes satelitales con las cuales se trabaja, se delimitaron tres zonas: verde, cumplidores, amarillo, en riesgo o en estado indeterminado, y rojo, en clara infracción.
En el primer semestre de 2016 se notificó a los padrones que aparecían en amarillo y rojo, y en el segundo semestre de ese mismo año se contrató a varios agrimensores para que visitaran estos predios y corroboraran lo que efectivamente sucedía allí.
Luego de estas acciones, sobre un total de 50 padrones registrados por el visualizador, el 60 % de los que inicialmente figuraban como infractores, en rojo, cambió su estado inicial: 80 % a verde y el restante 20 % a amarillo, por la dificultad de determinar claramente su situación. De los padrones que comprendía la franja verde, 15 % cambió de estado, la mitad a rojo y la otra mitad a amarillo, y, de los que conformaban el estado indeterminado, amarillo, el 90 % había cambiado a verde.
Según Nario, con las acciones aplicadas se determinó la necesidad de avanzar en la implementación de alvéolos y ejes de cauces, aplicar un control sistemático, definir una estrategia de control intermedio y mejoras en los procedimientos de campo realizados en el primer semestre del año pasado.
Está prevista la compra de una tecnología de alta definición para tomar fotografías satelitales, el Gobierno analiza la posibilidad de trabajar con rayos infrarrojos para determinar el cauce y con experiencias de control continuo remoto que permitirá casi en tiempo real ver qué cambios ocurren. También se estudia la probabilidad de controles intermedios, como la compra de paquetes de imágenes satelitales de alta resolución, utilización de drones y aviones.