Cambio de mando 
Tras agradecer a los presentes en el acto, a sus compañeros de directorio y a las instituciones relacionadas con la lucha por los derechos humanos por haberla propuesto para el cargo, Guianze resaltó el trabajo de los funcionarios de la INDDHH, quienes “fueron llegando de a poquito y ayudaron a armar codo a codo la institución”.
"Los funcionarios permanecerán en sus cargos, a diferencia del consejo directivo, que es nombrado de modo rotativo, según mandata su ley de creación", aclaró.
Aseguró, además, que asumir la presidencia de esta entidad implica una gran responsabilidad, que compartirá con sus compañeros de directorio, ya que, por tratarse de un colegiado, los cinco adoptan las resoluciones consensuadamente.
Explicó que la institución ha logrado avances importantes en sus dos años de existencia, a pesar de los escasos recursos humanos disponibles, pero que aún restan muchas cosas por hacer, como aumentar la visibilidad de sus atribuciones y funciones.
“Nos anima el propósito de avanzar hacia la institucionalización, con acciones dirigidas hacia adentro y hacia afuera. Estamos en proceso de construcción y, seguramente, por esa razón sigue habiendo confusiones que provienen tanto de la sociedad civil, de los medios de comunicación, como del sistema público”, lamentó.
En este sentido, aclaró que se trata de una institución estatal, pero cuenta con la independencia garantizada por los Principios de París, incluidos en la ley que creó al instituto. Añadió que se trabaja en un proyecto para modificar algunos aspectos de esa ley de creación, que deberá ser consensuado y considerado en la próxima legislatura.
Entre los desafíos pendientes para este año, se realizará un llamado a concurso para cubrir vacantes administrativas y técnicas con el objetivo de extender la atención del instituto hacia todo el país. Guianze también estimó necesario concretar un diálogo entre la sociedad civil y el Estado, y lograr un fluido intercambio con el sistema judicial.
“Nuestro poder de convocatoria al sector público deberá aumentar sensiblemente (…), sabemos que cuesta acostumbrarse a una institucionalidad nueva que incomoda con pedidos de informes y recomendaciones, pero es nuestra responsabilidad aprender a transmitir el sentido de nuestra intervención, así como conquistar un sitio dentro de la estructura del Estado en base a actuación seria y fundada, pero antes que nada, al diálogo franco y leal”, subrayó.
Por su parte, el presidente saliente, Juan Raúl Ferreira, agradeció a sus colegas y dijo sentirse muy orgulloso de ellos. “A veces tenemos discrepancias, a veces discutimos, pero siempre llegamos a un consenso”, aseguró. Felicitó y agradeció a Guianze por la nueva tarea que emprenderá y descartó que su gestión será intachable.
Guianze promoverá diálogo y reconocimiento de la Institución Nacional de Derechos Humanos
Mirtha Guianze dijo, al asumir este lunes la presidencia de la Institución Nacional de Derechos Humanos (INDDHH), que trabajará para que se reconozca a la entidad y apostará al diálogo para hacer más fluida la comunicación con la sociedad civil y el Estado. La exfiscal se hace cargo del timón del consejo directivo del cuerpo de cinco integrantes hasta junio de 2015, en reemplazo de Juan Raúl Ferreira.
"Los funcionarios permanecerán en sus cargos, a diferencia del consejo directivo, que es nombrado de modo rotativo, según mandata su ley de creación", aclaró.
Aseguró, además, que asumir la presidencia de esta entidad implica una gran responsabilidad, que compartirá con sus compañeros de directorio, ya que, por tratarse de un colegiado, los cinco adoptan las resoluciones consensuadamente.
Explicó que la institución ha logrado avances importantes en sus dos años de existencia, a pesar de los escasos recursos humanos disponibles, pero que aún restan muchas cosas por hacer, como aumentar la visibilidad de sus atribuciones y funciones.
“Nos anima el propósito de avanzar hacia la institucionalización, con acciones dirigidas hacia adentro y hacia afuera. Estamos en proceso de construcción y, seguramente, por esa razón sigue habiendo confusiones que provienen tanto de la sociedad civil, de los medios de comunicación, como del sistema público”, lamentó.
En este sentido, aclaró que se trata de una institución estatal, pero cuenta con la independencia garantizada por los Principios de París, incluidos en la ley que creó al instituto. Añadió que se trabaja en un proyecto para modificar algunos aspectos de esa ley de creación, que deberá ser consensuado y considerado en la próxima legislatura.
Entre los desafíos pendientes para este año, se realizará un llamado a concurso para cubrir vacantes administrativas y técnicas con el objetivo de extender la atención del instituto hacia todo el país. Guianze también estimó necesario concretar un diálogo entre la sociedad civil y el Estado, y lograr un fluido intercambio con el sistema judicial.
“Nuestro poder de convocatoria al sector público deberá aumentar sensiblemente (…), sabemos que cuesta acostumbrarse a una institucionalidad nueva que incomoda con pedidos de informes y recomendaciones, pero es nuestra responsabilidad aprender a transmitir el sentido de nuestra intervención, así como conquistar un sitio dentro de la estructura del Estado en base a actuación seria y fundada, pero antes que nada, al diálogo franco y leal”, subrayó.
Por su parte, el presidente saliente, Juan Raúl Ferreira, agradeció a sus colegas y dijo sentirse muy orgulloso de ellos. “A veces tenemos discrepancias, a veces discutimos, pero siempre llegamos a un consenso”, aseguró. Felicitó y agradeció a Guianze por la nueva tarea que emprenderá y descartó que su gestión será intachable.