Iberoamérica acuerda fortalecer democracia, participación ciudadana y políticas públicas
El texto llama a los países iberoamericanos a fortalecer la administración pública y garantizar la vigencia de reglas claras y previsibles en materia de gestión pública. Al mismo tiempo, insta a las naciones participantes de la XXI Cumbre Iberoamericana a consolidar los órganos gubernamentales nacionales específicos, a profesionalizar la función y gestión públicas, dotándolos de las competencias, capacidades y recursos necesarios para que cumplan con su misión cada vez mejor.
Los jefes de Estado y Gobierno de los países integrantes de la Comunidad Iberoamericana, reunidos en la XXI Cumbre Iberoamericana, bajo el lema "Transformación del Estado y Desarrollo", suscribieron la Declaración de Asunción, que se adjunta.
El documento contiene 58 ítems. El primero, llama a los países iberoamericanos a "fortalecer la administración pública y garantizar la vigencia de reglas claras y previsibles en materia de gestión pública, para contribuir a la gobernabilidad democrática con participación ciudadana, a la cohesión social y a las políticas públicas inclusivas y no discriminatorias".
En materia económica, el ítem número 41 llama a "establecer políticas públicas dirigidas a la multiplicidad de actores del sistema económico, orientadas al impulso de los procesos de producción, distribución, intercambio, comercio, consumo, con sistemas de protección al consumidor, para potenciar el crecimiento económico con inclusión social y la innovación productiva nacional".
El siguiente punto llama a los países firmantes del documento a "propender a la democratización del acceso a los factores de producción, de acuerdo a la legislación de cada país, para fortalecer la participación de micro, pequeños y medianos productores, empresarios, actores de la economía en general, respondiendo a los principios de inclusión económica y social".
En ese sentido, el ítem 35 insta a "promover, de acuerdo a las capacidades del sistema financiero de cada país, el acceso a líneas de crédito y servicios no financieros para mujeres, jóvenes, micro, pequeñas y medianas empresas (MPYMES), pequeños agricultores y otros sectores en condiciones de vulnerabilidad y exclusión.