INAU inauguró Centro Maitei para Programa de Fortalecimiento de las Funciones Parentales
El pasado martes 17 de diciembre, a las 17:30 horas, el INAU realizó la inauguración del Centro Maitei en Montevideo (Magallanes 1932). La nueva dependencia corresponde al Programa de Fortalecimiento de las Funciones Parentales que implementa con la colaboración de UNICEF y PNUD. El centro trabajará con niños de entre 0 y 7 años que por diversas circunstancias ven interrumpidos los cuidados de sus familias de origen.
El Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU) inauguró el Centro Maitei —en guaraní: "saludo, encuentro"— que integra el Programa de Fortalecimiento de las Funciones Parentales. Es un proyecto piloto que cuenta con el apoyo de la UNICEF y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y consiste en el ingreso a un sistema de protección de 24 horas a niños de entre 0 y 7 años y grupos de hermanos que carecen de los cuidados de sus familias de origen.
En diálogo con la Secretaría de Comunicación de la Presidencia de la República, Alejandro López, director de la División Estudio y Derivación del INAU —de quien depende administrativa y técnicamente el proyecto Maitei—, expresó que el programa “trata de fortalecer todas las alternativas a nivel de la familia, y en la medida en que exista la separación de un niño, por diferentes razones, del ámbito familiar de origen la construcción de alternativas para su protección por 24 horas”.
Según explicó López, una vez que se constata que han sido vulnerados los derechos del niño y se decide separarlo de su ámbito biológico de origen, este es derivado al proyecto Maitei, donde se profundiza el diagnóstico y se trabaja sobre la trayectoria previa del niño en los diversos ámbitos institucionales. Allí se reconstruye la historia de la familia y se generan estrategias concretas a corto, mediano y largo plazo. Si al realizar la evaluación del caso se decide que la situación del niño es transitoria, existe la posibilidad de que este retorne al ámbito familiar. En cambio, si la situación implica un período de trabajo más prolongado, el niño es derivado a los denominados Centros de Acogimiento.
De acuerdo con López, “los Centros de Acogimiento continúan la estrategia generada a partir del proyecto Maitei, no solo en la atención directa al niño sino también de proyección hacia el futuro, incluida la posibilidad de adopción del niño con una familia que lo desee integrar a su dinámica, y frente a la falta de adopción, de crecer en una Familia Amiga dentro del Programa de Acogimiento o en un hogar de los existentes a nivel de la capital o del interior del país”.
Existen casos en los que es necesario separar a los hermanos, porque uno de ellos requiere atenciones específicas. Por ejemplo, cuando se trata de una discapacidad o un requerimiento sanitario muy importante. Sin embargo, López declaró que “desde hace un tiempo, hemos venido reformulando este proyecto de que los hermanos en general se mantengan juntos en determinados ámbitos. Por eso hemos construido algunas estrategias que vienen funcionando, como el Proyecto de Familias de Cuidado Transitorio, que son las cuidadoras de emergencia actuales, que han venido integrando a estos grupos de hermanos”.
En esencia, el cometido del proyecto es que “la familia de origen pueda fortalecerse, modificar su situación, y que el niño pueda volver al ámbito en el que debe crecer, por derecho,” afirmó López.
La inauguración fue presenciada por el director de UNICEF- Uruguay, Egidio Crotti, la coordinadora del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, el directorio completo del INAU, directores de División del INAU, jueces de familia, algunos representantes de la cátedra de Psiquiatría Infantil del hospital Pereira Rossell, personal educativo y técnico de las diferentes dependencias del INAU, el cuerpo de educadores y técnicos de UNICEF y de la División Estudio y Derivación del INAU.