Instituto de Rehabilitación dispone de 84 nuevos operadores penitenciarios para Montevideo y Salto
“El operador penitenciario es el eje de la rehabilitación, pues al no ser un policía que está junto a los internos no lo visualizan como un enemigo”, alegó el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, en el acto de ingreso de 84 operadores al Instituto Nacional de Rehabilitación. “Las cárceles no deben ser un depósito de presos, sino un lugar donde se rehabiliten y capaciten para insertarse luego en la sociedad”, asumió.
“Estamos elaborando un proyecto de ley para pasar, como máximo el 1.° de enero de 2021, al Instituto Nacional de Rehabilitación como un servicio descentralizado dependiente del Ministerio de Educación y Cultura. En el correr del próximo mes ingresará al Parlamento”, mencionó el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, en el acto de egreso de la generación 2016-2017 de operadores penitenciarios; 84 desempeñarán funciones, 77 de ellos en la zona metropolitana y el resto en Salto.
En el acto desarrollado este viernes 15 en el Centro de Formación Penitenciaria (ex cárcel Cabildo) el jerarca subrayó que en ese sistema el operador penitenciario adquirirá mayor responsabilidad, pues el rol de la Policía será controlar la puerta de ingreso, el perímetro y algunas emergencias que se produzcan en los centros penitenciarios.
“Todo lo demás lo tiene que asumir el operador penitenciario, que es una persona civil que tendrá una mejor situación edilicia, porque el hacinamiento que tenemos hoy ya no estará luego de la inauguración de la unidad en Punta de Rieles para 2.000 plazas, las obras en los módulos uno y dos de Santiago Vázquez, que albergarán 600 plazas, otro en Canelones, con 100 plazas, y una unidad en Florida, para 150 personas”, acotó.
El curso, que se inició en noviembre de 2016 y culminó en agosto de 2017, desarrolló una propuesta teórico-práctica progresiva e integral de intervención socioeducativa y seguridad. La currícula tendrá algunas modificaciones, debido a la nueva gestión penitenciaria en los cursos que se están iniciando para 233 operadores, que egresaran en 2018.
“Las cárceles no deben ser un depósito de presos, sino un lugar donde se rehabiliten y se capaciten para poder insertarse en la sociedad cuando recuperen la libertad”, manifestó Bonomi.