Lorenzo defendió las compras estatales como instrumento útil para el desarrollo nacional
En la apertura del taller “Las compras públicas como motor del desarrollo productivo y social”, Fernando Lorenzo reafirmó el potencial de las compras del Estado como un instrumento útil que contribuye al desarrollo productivo y social del país. Destacó la importancia de la Ley N.º 18.362, del Programa de Contratación Pública para el Desarrollo y de la Agencia de Compras y Contrataciones del Estado.

La Concertación para el Desarrollo —integrada por la Universidad de la República, la Federación de Cooperativas de Producción, las Cámaras Empresariales y el PIT-CNT— organizó el taller "Las compras públicas como motor del desarrollo productivo y social”. El acto de apertura incluyó la presencia del ministro de Economía y Finanzas, Fernando Lorenzo; el ministro de Industria, Energía y Minería, Roberto Kreimerman; el presidente de ANCAP, Raúl Sendic; la presidenta de ANTEL, Carolina Cosse; el rector de la Universidad, Rodrigo Arocena; el gerente de compras de la Intendencia de Montevideo, Gustavo Cabrera; y los representantes sindicales Marcelo Abdala y José Saavedra.
En la oratoria, Fernando Lorenzo sostuvo que los instrumentos de políticas públicas cumplen el objetivo de contribuir en las políticas económicas y al desarrollo productivo y social. “Todos los instrumentos son vivos —por su jerarquización, por mayor o menor demamda— y deben ser adaptados a la realidad. Este instrumento ha mantenido vigencia en las políticas económicas positivas, pero ha cambiado la forma en que operó a lo largo de los años”, dijo.
En ese sentido comentó tres aspectos fundamentales: el punto de vista conceptual sobre el espacio de que disponen en las empresas públicas para realizar un desarrollo productivo y social, la institucionalidad para desarrollar las políticas con un marco jurídico transparente y claro, y los desafíos o condicionantes para maximizar el aporte de su contribución al desarrollo del país.
Conceptualidad
“Sería un error desaprovechar el potencial de las compras como un instrumento del desarrollo productivo y social, pero no deben tener solo un objetivo, sino que se deben enmarcar en objetivos múltiples”, destacó Lorenzo. Recordó que en el pasado existieron fuertes rechazos a este instrumento.
El proceso de compra es importante en relación a la actividad económica del país, pero no tiene suficiente importancia como para constituirse —por sí mismo— en un instrumento que dé un aporte superlativo al desarrollo. “Hará su aporte, pero cuidado, no sobredimensionemos el carácter general del mismo”, expresó el jerarca.
Subrayó que los procesos de compras públicas garantizan la continuidad de la transparencia, aseguran escenarios competitivos, respetan un conjunto de reglas y continúan con los resguardos y garantías “que contribuyen al bajo índice de corrupción”.
“La capacidad de compra del Estado es desigual en distintas organizaciones, porque la propia naturaleza de las actividades lo hacen así, y lo peor es, ante algo diferente, tratarlo como si fueran iguales”, expresó Lorenzo. Explicó que están documentadas las prácticas que fracasaron por pensar de esa manera.
Institucionalidad
En ese sentido, el titular del Ministerio de Economía y Finanzas, acotó que la promulgación de la Ley N.º 18.362 (en octubre de 2008) estableció un nuevo marco jurídico para las políticas de preferencias tanto para la industria como para la producción nacional.
“El nuevo régimen de preferencias generales para la actividad nacional establece una contrapartida brindada a través del Programa de Contratación Pública para el Desarrollo”. Expresó que dicho programa reglamenta tres subprogramas, de los cuales uno está implementado (MIPYME), y dos están pendientes de implementación (tecnología de la información y pequeños productores agropecuarios).
“Esta norma permite hacer sustentables los procesos, ampliando los porcentajes de preferencia, y constituye una reglamentación clara sobre la reserva del mercado”, puntualizó el ministro.
El último ítem institucional clave, según su opinión, es la creación de la Agencia de Compras y Contrataciones del Estado, encargada de administrar el conjunto de criterios y definir las políticas de compras.
“Tarde o temprano, los programas de contrataciones de compras públicas serán internacionales y estarán involucrados en el cierre de acuerdos valiosos para el país. Por lo tanto, se debe tener cuidado en el diseño de los programas porque deben ser homologables en la negociación internacional y eso —la homologación— está claramente establecida en la Ley N.º 18.362”, opinó el ministro de Economía.
Desafíos
Lorenzo desaconsejó —a actores involucrados en compras estatales— la sofisticación de los instrumentos, que no hace a la efectividad de los mismos; "la norma jurídica no debe ser compleja", dijo. El proceso debe ser diferente según el proveedor o institución que adquiera el producto y siempre el vínculo entre proveedor y comprador debe ser transparente, concluyó el ministro.