Mujica: “Debo pedir sentidas disculpas a quien pude lastimar en estos días por mis dichos”
“Una vez que se violentó la intimidad por el juego del mercado, no tengo otro camino: debo pedir sentidas disculpas a quienes pude lastimar en estos días por mis dichos y sobre todo a quienes son -como nosotros- integrantes del sueño de patria grande y federal”, expresó el Presidente de la República, José Mujica, en su audición por M24. Asimismo, llamó a recordar la historia y las consecuencias de la falta de unidad.

En su audición radial por M24, el Presidente de la República, José Mujica, comenzó haciendo referencia a las peripecias de la clandestinidad, cuando desarrolló junto a otros la disciplina de apartar de su memoria números telefónicos y cualquier dato identificatorio, a tal extremo que su “sistema mental quedó reprogramado para no poder retener números telefónicos”.
“Nos quedaron de aquellos años muchas cosas, a las que hay que sumar el origen: vengo de los barrios pobres”, dijo Mujica para argumentar lo que él mismo denomina “hablar corriente e íntimo entre pocos”. Definió ese lenguaje como “reo, áspero, canero”.
“Hubo que hablar por años con presos comunes y soldados. Esto importaba porque acechábamos la oportunidad de ser libres. Dos veces nos fugamos y otros tantos intentos, pero ese lenguaje en la intimidad quedó grabado para siempre. Hubo que ser mordaz y burlesco con nosotros mismos para hacer del dolor una sonrisa cáustica que ayudaba a sobrevivir. Desde entonces reina entre nosotros los sobrenombres, la exageración como contracara del vacío existencial que nos tocaba vivir”, relató.
En este sentido, explicó que se trata de un “lenguaje herramienta y no causa, que juega para los íntimos y que no encajará jamás con el lenguaje de la libertad de prensa ni el discurso público que cultiva otros fines”.
“Cuando se violenta la intimidad por el juego del mercado, no tengo otro camino que pedir sentidas disculpas a quienes pude lastimar en estos días por mis dichos y sobre todo que son como nosotros integrantes del sueño de patria grande y federal”, indicó el Mandatario.
Recordó que en estos años los acusaron de todo, de ser “genuflexos”, que este gobierno “se subordina”, “y nadie nos pidió disculpas”. “Al parecer estas son las reglas de juego. Tratamos de hacer todo lo posible por sostener una relación que tenga en cuenta los intereses económicos de la gente que trabaja, pero en este país hace años que existe una campaña cuasi-permanente. Se dice que la Argentina se cae, que va camino a ser una república paupérrima”, lo que consideró todas mentiras.
El jerarca argumentó que Argentina creció enormemente. “Desde el año 52, creo, no tuvo gobiernos que hicieran tanto por los postergados”. Reconoció que puede tener problemas como todos y que sus medidas defensivas nos afectan, pero recordó que la masa del pueblo argentino “nos quiere y respeta”.
Mujica aseguró que cuando a Argentina le va bien, Uruguay se beneficia y al revés; y que cuando la relación es mala, "terminan ganando los de lejos". Asimismo, sostuvo que son miles los compatriotas que viven allá y están absolutamente integrados. “Sin embargo, se insiste con campañas, que cuando uno hace memoria parecen del anti-argentinismo de la década del 50 y eso es veneno”, aseveró.
“Sabemos que puede existir el deseo de que la relación económica se perjudique y con eso crezca la oposición, pero tenemos que recordar nuestra historia. Martín Fierro decía que los hermanos sean unidos, por encima de todas las cosas. En estos días en que hablamos del artiguismo, recordemos las consecuencias de la falta de unidad”, indicó.
Citó como ejemplo cuando hace cuatro años en plena campaña electoral, “parte de la libertad de prensa nos desató una campaña que nos presentaba como propietarios del arsenal de Feldman, aprovechando una coyuntura. Después las cosas llevaron su curso y su desenlace patético. Nada teníamos que ver, sin embargo nadie, en aquel entonces, nos pidió disculpas. Son cosas que uno tiene que decir: ‘calavera no chilla’”, concluyó.