Mujica dijo que el Gobierno atenderá problemas de reparto sin descuidar ritmo inversor
“Los recursos no son infinitos ni tienen generación mágica. Debemos ver el conjunto para que la economía siga marchando y mantenga en alto el ritmo inversor del país, pero haciéndole frente a algunos problemas graves de reparto”, indicó el Presidente Mujica en alusión al análisis que el Gobierno realiza de la Rendición de Cuentas. Dijo que son días difíciles y de decisiones donde “se corre el riesgo de no conformar a todos”.

En su audición por Radio Uruguay, el Presidente de la República, José Mujica, se refirió a la Rendición de Cuentas sobre la que el Gobierno trabaja intensamente en los últimos días. Dijo que "es natural que en esta instancia la gente se preocupe por la suerte de sus ingresos y reclame mayor cuota de participación en la distribución del ingreso nacional y, por ende, se movilice". Explicó que "los recursos disponibles expresan la masa de recursos fiscales que el Gobierno extrae de la actividad global de la gente, es decir, que es el trabajo el que multiplica los bienes”, y expresó que "resulta lógico que quienes se sienten más postergados reclamen". Según indicó: "La clave está en hasta dónde podemos llegar sin afectar profundamente los motores más íntimos que mueven el campo del trabajo”. Ante comentarios sobre la existencia de un “enfriamiento” de la marcha del ciclo económico", expresó que "no hay enfriamiento hoy, sino que hace más de dos años que la bonanza de un viento a favor se terminó”.
Aludió a las repercusiones de la crisis europea; la depreciación creciente que afectaba a la moneda nacional y las repercusiones que esto generaba en el trabajo y en las actividades industriales. También recordó los obstáculos originados en la región como consecuencia de decisiones defensivas que tomaron los vecinos. Explicó que "el enfriamiento no empezó hoy", y que si no se manifestó en Uruguay es porque “el alto nivel de inversión que tuvo el país fue un agente movilizador de toda la economía”. Recordó que la tasa de inversión es inusitada para la historia de Uruguay, lo que mantuvo, en términos reales, un funcionamiento positivo de la economía, con una tasa de crecimiento actual del 4 %, más del doble de la histórica.
El Presidente resaltó la importancia de mantener el nivel alto de inversión, considerado agente multiplicador del trabajo y la riqueza. Recordó que para que haya inversión debe haber seguridad, garantía, buena predisposición política, estabilidad y un margen importante de previsibilidad de la economía. “Si el Gobierno descuelga un conjunto de impuestos para acrecentar su realidad fiscal, para acercarse al tono de la demanda que se le reclama, correríamos el riesgo, muy peligroso, de acotar significativamente el campo de la inversión. Lograríamos un pequeño éxito pasajero y propenderíamos a perjudicar, en el mediano plazo, en forma irreversible, la propia marcha del país”, dijo.
“Cuando uno empieza por reconocer la justicia de los reclamos, tiene en el otro extremo la necesidad imperiosa de no hacerse el sordo. Son realidades contradictorias con las que hay que navegar. Son días difíciles para la toma de decisiones del Gobierno, que no tenemos, ni por asomo, resueltas”, indicó. “No estamos cerrados, pero tampoco los recursos de los que disponemos son infinitos. Al peligro de desatar inflación, al peligro de un aumento desmesurado del déficit fiscal, le tenemos que sumar que no podemos inducir una política práctica que conduzca a una retracción en el campo de la inversión, porque nos comeríamos las posibilidades de trabajo del mañana. Pero también tenemos que reconocer que hay sectores que se sienten enormemente retrasados en el reparto social; es justo que reclamen y que hagamos esfuerzos por mitigar ese retraso. Dentro de estos limites el Gobierno deberá tomar decisiones”, sostuvo.
Dijo que quizás fue un error haber gestado el presupuesto vigente comprometiendo al máximo “todo lo que racionalmente se podía disponer”. “Se puede opinar que debimos ser más políticos y menos técnicos, en el sentido de dar menos al principio y más al final, porque lo que se dio al principio no tiene memoria. Algunos actores nos lo han planteado, es una duda. En todo caso quienes vengan luego de nosotros deberán plantearse este ejemplo histórico y ver si esto es negativo. Fuimos optimistas de entrada y dimos todo lo que se podía dar en esa circunstancia. Estas son lecciones políticas que nos da el manejo de la economía hacia el futuro del país”.
Veterinarios
En otro orden, se refirió a un conflicto que entiende que “le hace mal al país”, el de los veterinarios. Dijo que tienen derecho a reclamar, pero los instó a pensar sobre la importancia del comercio de la carne para el país. “No abandonen sus reivindicaciones, pero no detengan una actividad que es una especie de arteria para el país”. Aseguró que ese dejaría casi de ser un conflicto gremial, para ser corporativo y afectar a la sociedad toda.