Declaraciones en Punta del Este

Mujica: “No es la confrontación nuestro camino, es la habilidad negociadora”

El Presidente Mujica aludió a la convivencia con países vecinos. “No hay equilibrio porque nosotros somos muy chicos. Tenemos que ser doblemente inteligentes”, indicó el mandatario, quien sostuvo: "La confrontación no es nuestro camino, sino la habilidad negociadora. Si queremos servir a nuestro pueblo, fundamentalmente a las masas trabajadoras, tenemos que tener la inteligencia de administrar estos fenómenos”.

No olvidarse de completar este campo
El Presidente de la República, José Mujica, el miércoles 19 de diciembre habló ante empresarios del sector turístico, instalados en Punta del Este. El almuerzo fue organizado por la Dirección General de Turismo y Destino Punta del Este en el restaurante Boca Chica en pleno Puerto del principal balneario.

Mujica habló de la venta de servicios en el mundo actual. Dijo que es una actividad que “va a favor de la condición humana”. “Tonto de nosotros si no sabemos entenderlo y aprovecharlo. Y genera una multitud de cosas”, agregó. 


En el mismo sentido, el mandatario agradeció a quienes “hicieron posible el Uruguay natural, el Uruguay turístico”. Reconoció las potencialidades de Uruguay, y aseguró que se basan en la seguridad, la estabilidad y el buen trato. “Somos republicanos, nadie vale más que nadie, no somos un país de ‘pitucos’ que despreciamos a la gente. Nos sentimos nosotros, tenemos ciertos valores por decirle al mundo”, indicó. 


Uruguay, entre Argentina y Brasil
“Somos un fino algodón entre dos cristales, los países no se mudan, nos toca vivir entre Brasil y Argentina y acá estamos acampados en la tranquera del Río de la Plata. No hay equilibrio porque nosotros somos muy chicos, por lo tanto tenemos que ser doblemente inteligentes. La administración del Río y lo que pasa es una cuestión esencial para los uruguayos, es una causa nacional, un frente grande y común. Debiéramos tener el grado de inteligencia de darnos cuenta de que podemos tener diferencias en 20 cosas, pero hay cosas que nos tienen que unificar. El interés del país significa que este país funcione, sea una puerta de entrada de la ‘montonera’ que significa Buenos Aires, una ciudad gigantesca que cuando llega el verano todo el mundo quiere ‘disparar’ y el que no ‘dispara’ es porque ‘no le da la nafta’. Y hay que ayudar a esa ‘disparada’. Esa ‘disparada’ significó en gran medida un aporte a este país”.

Mujica aclaró que “no somos enemigos porque a su vez en invierno, nosotros que tenemos ínfulas de conocer ‘la gran ciudad’  y vamos de vuelta, y la que ellos dejaron en el verano nosotros la llevamos en el invierno de vuelta”.

“Tenemos que cultivar esa identidad y esa relación que es difícil. Nunca meternos adentro de los líos de la política argentina, eso es problema del pueblo argentino. Pero saber lidiar con todos y ser amigo. No es la confrontación nuestro camino, es la habilidad negociadora. El más pequeño tiene que ser hábil, inteligente, porque la costa uruguaya, esa parte tan esencial de este país, tiene una honda relación y si queremos servir a nuestro pueblo, fundamentalmente a las masas trabajadoras de nuestro país, tenemos que tener la inteligencia de administrar estos fenómenos”, manifestó.

Respecto a la actividad turística, definió a los inversores inmobiliarios como “intermediarios” en esa relación. “De las facilidades que tengan ustedes para hacer ese trabajo, habrá miles de puestos de trabajo para los obreros de la construcción o no habrá”, expresó.


Contra la sociedad del despilfarro

Sobre la actividad de los empresarios y lo que deparará el futuro, dijo que “el mundo se está transformando aceleradamente. Estamos asistiendo a una época de cambios tan revolucionarios como la historia del hombre tal vez no conoció. Nunca en un período tan corto de tiempo a escala planetaria se han dado los cambios que se están procesando. Asia dentro de poco será otra historia y el mundo será otra cosa”, reflexionó.  
 
Mujica expresó la angustia existencial que le genera preguntarse “¿a dónde va este mundo?” y no tener respuesta. “Inventamos un tipo de civilización en la cual vivimos, donde si la economía no crece es como si se viniera el fin del mundo, pero para que la economía crezca, tiene que haber más consumo y hay que gastar más, consumir más”. Esto requiere incentivar la innovación. En realidad es inventar cosas nuevas para vender y estamos enroscados en eso. Y por otro lado decimos que hay que cuidar los recursos naturales”, reflexionó el Presidente, quien se refirió a la contradicción que se genera.

“El cambio climático es consecuencia del modelo despilfarrador de energía que hemos planteado. Ojo, no se confundan. Yo no estoy haciendo una apología a la pobreza, ni de quedarse quieto, ni de volver a la época de las cavernas, ni ser indígenas con taparrabos, estoy en contra de la sociedad del despilfarro. Cuando hacemos eso, lo que estamos gastando es tiempo humano, vida”, concluyó.