Mujica: “por más que se globalice la economía, nuestra subjetividad no puede globalizarse”
Este lunes se llevó a cabo la sesión inaugural de la primera reunión de la Conferencia Regional sobre Población y Desarrollo de América Latina y el Caribe, en pos de una agenda regional que haga foco en la integración, la igualdad y los derechos. En la ocasión, Presidente José Mujica expresó que no obstante la globalización de la economía, “nuestra subjetividad no puede globalizarse”.

Durante la sesión inaugural, el Presidente Mujica expresó que “tiene todo que crecer en un mundo de enormes tendencias globalizadoras donde, sin embargo, al parecer se está construyendo una civilización de carácter planetaria y masiva con los mismos valores, por lo menos fundamentales, por todas partes”.
Mujica sostuvo que, sin embargo: “por más que se globalice la economía, nuestro corazón, nuestra subjetividad no puede globalizarse”, y añadió: “allí están cada corte de Estado con su procesión y, entonces, al mismo tiempo que hay brutales fuerzas globalizadoras, nuestra humanidad permanece y tenemos una especie de desgobierno para la civilización que hemos contribuido a desatar y de la cual por momentos somos víctimas, somos parte víctimas y victimarios. En ese marco surgen las nuevas generaciones”, razonó.
En alusión a la tendencia a una sociedad de consumo, reflexionó que “para que la economía crezca hay que aumentar la demanda, y para aumentar la demanda hay que multiplicar la presión propagandística en todos los terrenos: todo ser humano debe ser un gigantesco comprador, alguien capaz de contraer cuentas indeterminadas”.
Al respecto, dijo: “donde todo al parecer debe de crecer, empezando por el consumo, nos tenemos que hacer la pregunta: ¿nuestros muchachos serán más felices? Y, ¿qué es la felicidad? No tengo respuestas muy claras, pero no puede estar muy lejano a la libertad”.
Conviniendo en la dificultad de definir el concepto de libertad, afirmó que “tiene varios ingredientes: la capacidad de tolerar lo diverso, lo contradictorio y lo que es distinto, porque la libertad supone un hondo respeto de la condición humana”.
Pero sostuvo que, además, existe “una libertad más personal, más pequeña, pequeña para el mundo pero grande para cada uno de nosotros: tener tiempo, y tener tiempo para vivir; y tener tiempo para vivir significa gastar tiempo en aquellas cosas que a uno lo motivan”, y afirmó: “soy libre en ese momento donde gasto el tiempo que no tiene precio, que no tiene valor de mercado, que le da sentido al placer de vivir y de la existencia”.
Finalmente, el Presidente se dirigió a los jóvenes: “no se dejen robar la juventud de adentro. La de afuera, inevitablemente, se la lleva el tiempo. Pero hay una juventud peleable, territorio adentro, mirándonos hacia nosotros mismos, y está unida a una palabra muy simple y muy pequeña: solidaridad con la condición humana”, concluyó.
La reunión tiene como principal objetivo la conformación de una agenda regional con énfasis en la igualdad y el enfoque de derechos, contemplando el Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo (CIPD) de las Naciones Unidas, realizada en El Cairo en 1994.