Nuevos mercados, energía y telecomunicaciones son claves del crecimiento industrial
La diversifación de mercados y productos, la implementación de nuevas fuentes de energía y el avance en las telecomunicaciones han sido fundamentales para el desarrollo industrial en Uruguay, enfatizó este viernes el ministro de Industria, Energía y Minería, Roberto Kreimerman, en el marco de los Desayunos Útiles que organiza “Somos Uruguay”.
“El crecimiento pasa por la diversificación y por eso importa hacerlo en la industria para no quedar condenado a ciclos de crecimientos internacionales. Ante esto, la política general nacional ha logrado aumentar mercados y productos, lo cual representa un seguro importante para el futuro”, aseveró Kreimerman.
Subrayó al respecto que el país hace poco tiempo competía en el mercado en 220 rubros industriales y hoy lo hace en 750. También destacó el crecimiento de la balanza comercial con China y Brasil.
También precisó que 170.000 personas están trabajando en la industria, “lo cual hace aumentar la las inversiones y los salarios”.
Rol de la diversidad energética
Kreimerman dijo que “la industria es la principal demandante de energía en el consumo nacional y eso se explica por el aumento de la actividad industrial y la incorporación de tecnología con la finalidad de aumentar la productividad".
Para acompañar el crecimiento industrial fue necesario trabajar en el cambio de la matriz energética para no depender tanto del
petróleo y el agua. Este proceso fue "encabezado por el rol de las empresas públicas que es esencial
para la industria y para promover la inversión en el sector”, subrayó.
Preponderancia de Internet
En cuanto a las telecomunicaciones, enfatizó que la posibilidad de estar mejor comunicados a nivel internacional posibilitó el aumento de la producción en el ramo. “No hay sistema industrial que pueda trabajar sin un desarrollo fuerte de las telecomunicaciones”, aseveró.
Destacó el rol de Antel que permitió a Uruguay aumentar la velocidad de Internet en poco tiempo, lo que beneficia a la educación tecnológica industrial.
Desafíos país
El desarrollo en materia de minería de hierro, la inversión en explotación de hidrocarburos, biocombustibles, la demanda regional en industria naval y el ascenso en la escala productiva adquiriendo conocimiento, tecnología y valor agregado son los grandes desafíos que tiene el país por delante “para diferenciarnos con el resto del mundo”, explicó.
Uruguay, según los resultados de los últimos 10 años, es considerado por la Organización de las Naciones Unidas como parte del grupo de los ocho países emergentes “debido a que tiene 5 % de crecimiento industrial comparado con el resto del mundo y ha diversificado su producción”, señaló.
Agregó que, en materia de crecimiento industrial respecto a los demás países de América Latina, Uruguay se encuentra solo por debajo de Argentina, y que si se analizan los últimos 10 años la industria nacional creció 80 %.
¿Qué se ha hecho?
Kreimerman recalcó áreas en las que se ha avanzado, como el fortalecimiento de las cadenas productivas con mirada integral en todos sus eslabones, el apoyo a la inversión y promoción industrial a través del otorgamiento de beneficios fiscales, el Fondo de Inversión Industrial, el fortalecimiento de la demanda de las compras públicas en las pequeñas y medianas empresas (pymes), la integración regional e internacional y la ley de nuevo régimen de inversiones.
También destacó la implementación del Consejo de
Participación Tripartito, los planes en los 19 Consejos Sectoriales y los
programas de desarrollo local en acuerdos con las intendencias, el subsidio para
la reducción de la tasa de interés, el sistema nacional de garantía, la
articulación con Uruguay XXI, la aprobación de 9 parques industriales.
En la oportunidad también disertó el presidente de la Cámara de Industrias del Uruguay, Javier Carrau. Además estuvieron presentes los ministros de Desarrollo Social, de Trabajo y Seguridad Social, el ministro interino de Relaciones Exteriores, los presidentes de ANTEL, OSE y UTE e integrantes del nuevo directorio del Banco de la República Oriental del Uruguay.