Observatorio de Violencia y Criminalidad afirma que homicidios bajaron un 22 %
Un informe preliminar del Observatorio de Violencia y Criminalidad confirma la baja de los homicidios, en el entorno del 22 %, durante el primer trimestre del año en relación al mismo período del 2012. También se observa una caída en las rapiñas del 5 %, y en los hurtos, del 2,5 %. Una vez cerrado el trimestre, se brindarán todos los datos del Observatorio, informó su director, Javier Donnangelo.
El director del Observatorio, Javier Donnangelo, explicó que durante el 2012, tanto en enero como en marzo, las estadísticas de homicidios fueron “inusitadamente altas” en el país y que no se repitieron durante el resto del año. Este año, sobre todo en febrero y lo trascurrido del mes de marzo, los datos de homicidios muestran una tendencia similar a la información posterior al primer trimestre del 2012.
Cuatro de cada diez víctimas de homicidio tiene antecedentes penales, confirmó Donnangelo. Muchos de los casos identificados tienen que ver con el tráfico de drogas, pero el análisis no excluye otros delitos, subrayó el director del Observatorio. Para explicitar el peso de las víctimas de homicidio con antecedentes penales, Donnangelo indicó: “el porcentaje de uruguayos con antecedentes judiciales no alcanza, seguramente, ni al 5 % de la población; sin embargo, cuando consideramos a las víctimas de homicidio, ese porcentaje trepa al 40 %”.
En el 20 % de los casos de homicidio, las víctimas son mujeres. La mayoría de ellas no tiene antecedentes penales y esos delitos están vinculados a conflictos intrafamiliares, relaciones de parentesco o sentimentales. El 15 % de los homicidios son muertes derivadas de delitos contra la propiedad, y esta cifra se mantuvo “muy estable” a lo largo del tiempo, explicó Donnangelo. En 2002 el porcentaje fue el mismo, señaló.
Los escasos estudios sobre la calidad jurídica de las armas utilizadas en un homicidio revelan que las armas recuperadas, en un alto porcentaje de los casos, son armas con denuncias de hurto.
Descartó de manera enfática que la participación de menores en homicidios muestre un crecimiento entre 2011 y 2012: “hay algunas teorías que señalan que el aumento de los homicidios de 2012 se debería a una mayor cantidad de participación de adolescentes; esto no es así, porque las cantidades son muy similares. Esa hipótesis es equivocada”.
En cuanto al trabajo en conjunto del Observatorio y la Jefatura de Policía de Montevideo, Donnangelo señaló que en estos momentos ambos organismos se concentran en identificar los barrios donde son más frecuentes los incidentes con personas heridas con armas de fuego. “Tenemos un mapa construido, muy detallado, que identifica algunos barrios que sobresalen, claramente, al resto de Montevideo desde este punto de vista”.
Están identificados el barrio Cerro Norte, Las Acacias y Casavalle como las zonas con mayor número de casos detectados y, en un segundo escalón, los barrios Tres Ombúes y Pueblo Victoria.
Como conclusión, Donnangelo destacó que el trabajo de producción de información estadística junto al trabajo policial es un fenómeno nuevo que arroja resultados muy interesantes. “La información estadística se va a convertir en un insumo permanente de los procesos de planificación policial”, finalizó.