Comparecencia en el Parlamento 
Olesker aseguró que beneficiarios de programas del MIDES cumplen con contraprestaciones
“Hoy los diputados nos convocan a preguntarnos por qué tenemos algunos problemas porque nuestros propios documentos muestran esos problemas”, aseguró el ministro Olesker tras comparecer en el Parlamento este 15 de marzo. El jerarca brindó datos que corrigieron las prioridades y la coordinación de los programas de educación y trabajo. Aseguró que el 6% de desempleo y el 14% de pobreza muestran la mejora en la calidad de vida de los beneficiarios de los planes.

El ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, compareció en la Comisión de Población y Desarrollo Social de Diputados para informar acerca de las políticas del MIDES. Los temas analizados en la comisión parlamentaria estuvieron centrados en las políticas del ministerio y las mejoras alcanzadas en estos años, la llegada a la población objetivo, la mejora en los diagnósticos sobre los impactos de la política y el cumplimiento de las contraprestaciones.
La diputada nacionalista Analía Piñeyrúa, legisladora convocante, no descartó una interpelación al ministro ya que no le conformaron las explicaciones brindaras por el titular del MIDES.
En tanto Olesker indicó que “eso siempre pasa. Tradicionalmente se convoca por un tema, los ministros vienen y exponen y los legisladores de la oposición lo consideran insuficiente. Es casi inevitable”, sostuvo.
En su presentación, Olesker informó que el PANES que en el pasado asistía a 120 mil hogares y que actualmente son solo 30 mil las tarjetas duplicadas, la cuarta parte.
“Se pueden evaluar políticas sociales porque existen”, ratificó Olesker quien recordó que cuando ingresó al Ministerio de Salud Pública en 2005 nunca tuvo una evaluación de los programas de apoyo externo llamado FIS y FAS que existían desde los 90.
“Hoy los diputados nos pueden convocar a preguntarnos por qué tenemos algunos problemas porque nuestros propios documentos muestran esos problemas”, añadió el jerarca, quien aseguró que corrigieron el objetivo y mejoraron la superposición de programas mediante una única dirección de programas y coordinaron los programas de educación y de trabajo.
El ministro llevó a la comisión algunos datos sobre las personas que participaron en el programa FPB de UTU, Uruguay Trabaja y otros programas, así como los números con la trayectoria de las personas. “Si no hubiera trayectoria y las personas no mejoraran su situación, no habría 6% de desempleo, ni 14% de pobreza contra 40% que había en 2004”, añadió.
Consultado por las contraprestaciones y la visión que la oposición tiene del no cumplimiento de las mismas por parte de los beneficiarios, Olesker aseguró que las cumplen.
El jerarca explicó que por un lado están las contraprestaciones de programas que recibe el propio beneficiario y que tiene que dar algo a cambio, Uruguay Trabaja (tiene que capacitarse); Compromiso Educativo (tiene que rendir los cursos con cierto grado de suficiencia); Aulas Comunitarias lo mismo. Hay decenas de programas donde los beneficiarios cumplen sus contrapartidas en un 100% y se controlan. “Hay control porque hay capacidad de monitoreo y evaluación”.
También están los programas cuyas contrapartidas son el envío de sus hijos a la escuela, el liceo y atención en salud, básicamente las Asignaciones Familiares. “La Ley nos mandata y hay control. En algunos casos es insuficiente, pero alcanza con pedirle al BPS todas las bajas de Asignación Familiar (Plan de Equidad) por los niños que no van a la escuela y son decenas anualmente”, explicó.
Olesker dijo que hay que mejorarlo por el vínculo informático entre los organismos de la educación, la salud y el BPS. Para ellos se presentó recientemente el Sistema de Información Integrado de Área Social, programa que unifica las distintas acciones.
En la tarjeta Uruguay Social existe un control de lo que se adquiere. El 95% del gasto fue en alimentación y productos de higiene. La oposición entiende que es necesario darle una orientación más nutricional. Olesker explicó que eso se concreta por otra vía. “Lo que queremos es que la gente a la que el neoliberalismo le provocó su exclusión social y dejar de comer, coma y ese objetivo está más que logrado”, concluyó.