Olesker reivindicó la economía autogestionada como una alternativa al capitalismo
En Empalme Olmos, en las instalaciones de la Cooperativa de Trabajadores Cerámicos (CTC) —ex Metzen y Sena— se celebró el sábado 27 de julio la segunda asamblea anual de la Asociación Nacional de Empresas Recuperadas por los Trabajadores (ANERT). El ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, participó en la apertura del evento y reivindicó la economía autogestionada como una alternativa al capitalismo.
“Tenemos que ver a la economía autogestionada como la construcción de una sociedad alternativa en la perspectiva histórica y que, por lo tanto, debe ensamblarse y combinarse con una acción general en la sociedad que sea contrahegemónica en todos los campos”, sostuvo Olesker. Añadió que la economía autogestionada “es una parte sustancial de cualquier visión de izquierda” y debe ser entendida como un valor en sí mismo, no solo como un paliativo para empresas que cierran.
El ministro señaló en su discurso que las empresas autogestionadas por sus trabajadores afrontan los mismos riesgos de desaparecer que el resto de las empresas y aseguró que “si son debidamente apoyadas en su fase de desarrollo pueden competir con éxito en los mercados con la empresa capitalista clásica".
Según expresó Olesker, "la economía autogestionada es un valor con contenido ideológico que se refiere al campo de los valores humanos”. Agregó al respecto que la asociatividad refiere también a la distribución de los “frutos del trabajo”.
Impulso del Estado a la autogestión
El ministro consideró que el Estado debe intervenir proactivamente en el desarrollo de la economía autogestionada, contribuir a fortalecer los instrumentos que regulen el poder del monopolio y oligopolio; promover un sistema tributario que combata a la competencia desleal, que muchas veces se presenta con las empresas privadas; profundizar en una política de financiamiento —particularmente a través de la herramienta del Fondo de Desarrollo (FONDES)— y ampliarla a nuevos proyectos; apoyar los emprendimientos en búsqueda de mercados y desarrollar un sistema de compras públicas y, finalmente, debe apoyar los procesos de capacitación en la gestión, a través de sus instrumentos vigentes en el Instituto Nacional de Educación y Formación Profesional (INEFOP).
Autogestión y acceso a los servicios
Olesker consideró que la autogestión debe trascender al proceso productivo y debe extenderse al acceso a los servicios sociales. “Por eso el vínculo con las cooperativas de vivienda y con las de consumo debe mirarse integralmente y generar articulaciones entre todas ellas”, concluyó.