Organizaciones sociales presentaron en Minas sus proyectos de adaptación al cambio climático
El Sistema Nacional de Respuesta al Cambio Climático realizó, este jueves 26 en Minas, el tercer taller programado para 2019. Su objetivo es conocer proyectos de agrupaciones locales que abarquen temas rurales y propongan mejoras productivas con la incorporación de elementos ambientales o la reconstrucción de ecosistemas. Su titular, Ignacio Lorenzo, destacó la importancia de las acciones locales para generar aprendizajes.
La meta del sistema para este año fue la realización de tres talleres en los departamentos de Rivera, Río Negro y Lavalleja. En la jornada de Minas, participaron técnicos y ciudadanos de Lavalleja Rocha, Treinta y Tres y Maldonado. Proyectos que cuentan con financiamiento para emprendimientos rurales nuevos, mejoras productivas que incorporan elementos ambientales, reconstrucción de ecosistemas y algunos de educación ambiental y difusión fueron presentados en esa oportunidad, mencionó el titular de la Secretaría Nacional de Respuesta al Cambio Climático, Ignacio Lorenzo.
Estos proyectos están alineados a los compromisos asumidos por el país: reducir a la mitad las emisiones de gases que provocan el efecto invernadero, conservar los niveles de carbono en suelos y bosques nativos y disminuir las emisiones de metano y óxido nitroso en la producción ganadera.
Lorenzo aseguró que Uruguay cuenta con una agenda clara sobre adaptación al cambio climático, que incluye la reducción de riesgos, tanto para la producción como para las comunidades, por lo cual se trabaja en este tipo de talleres temas relacionados a las inundaciones y las sequías.
“Queremos conectar ese gran compromiso nacional con acciones locales en el territorio a partir de un diálogo constructivo para que los ciudadanos se sientan identificados y, además, generar sinergias y procesos de implementación con todos los sectores”, aseveró.
Como ejemplo, mencionó el proyecto que cuenta con 10 millones de dólares del Fondo de Adaptación al Cambio Climático, de la Organización de las Naciones Unidas, para que pequeños productores ganaderos inviertan en medidas para prevenir los efectos de las sequías. Uruguay fue uno de los primeros países en acceder a esos fondos. “Son acciones concretas que mejoran la vida de los productores y su capacidad productiva y nos permiten aprender estrategias para resistir, en este caso, donde el suelo es muy superficial”, concluyó.
Con respecto a las otras dos áreas en las cuales se desarrollaron los talleres anteriores, explicó que los desafíos en la zona norte incluyen mayormente la forestación y la ganadería en campo natural y, en el caso del litoral, las inundaciones y la protección de ecosistemas y áreas protegidas, aspecto en el cual se ha identificado que generan impactos positivos en las emisiones y la adaptación, aseguró.