Mario Layera sobre seguridad pública

“La prevalencia de la cultura preventiva sobre la represiva es una necesidad ineludible”

La profesionalidad policial, el rol comunitario de las comisarias, la mayor seguridad que da el Programa de Alta Dedicación Operativa en zonas críticas de Montevideo y zona metropolitana y que la investigación del delito se sustente en pruebas científicas fueron tópicos que el director de la Policía, Mario Layera, expuso en mirada 2030. “La prevalencia de la cultura preventiva sobre la represiva es una necesidad ineludible”.

Mario Mayera en mesa sobre seguridad ciudadana del Diálogo Social

Layera participó este martes 18, junto al ministro del Interior, Eduardo Bonomi, y al subsecretario de la cartera, Jorge Vázquez, de la tercera instancia de la mesa número 6 “Seguridad y Convivencia Ciudadana" del Dialogo Social – Uruguay hacia el Futuro, en la que más de 80 personas entre representantes de organizaciones barriales y de otras áreas de la sociedad civil consideraron la temática “La policía que queremos en el Uruguay del 2030".

En la oportunidad se presentaron propuestas por parte de la Policía de Paysandú, el Ejército, la Dirección de Información e Inteligencia Policial, la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresas y la arquidiócesis de Montevideo de la Iglesia Católica.

Layera, único orador en nombre del Gobierno, manifestó que para lograr un proyecto con mirada 2030 se debe partir de la base del diagnóstico actual sobre fortalezas y debilidades de la institución.
 
“Las mayores fortalezas son contar con una única Policía Nacional y los aspectos de la reforma que se están realizando en la administración desde 2010”, sintetizó.

Añadió que el perfil profesional del personal debe partir de mayores requisitos culturales, educativos y con debida formación en policía comunitaria.

“Es fundamental la calidad sobre la cantidad con un proceso de selección, capacitación y motivación con la más alta exigencia  que tenga acción proactiva y detección precoz del conflicto criminal y su origen”, indicó.

Explicó que las comisarias cumplirán un rol preponderante en la atención de las infracciones leves, conflictos relacionados a la violencia doméstica, de género y problemas vecinales, practicando la intermediación, negociación que informe a los mandos superiores y, junto a otros actores, la justicia restaurativa.

“Pretendemos que el personal policial se dedique a la seguridad en vía pública y la atención en las comisarias se brinde por parte de becarios de tercer nivel educativo. En ese sentido en noviembre ingresarán 225 becarios permitiendo que los administrativos pasen a la calle”.

En el área metropolitana de Montevideo, además de la policía comunitaria, se ofrecerá seguridad por parte del Programa de Alta Dedicación Operativa (PADO), que en el presente se despliega en 28 circuitos considerados de mayor peligrosidad según información que dispone la cartera ministerial.
 
Aseguró que en el interior del país se precisa de mayor policía comunitaria en el área rural.

“En el accionar se debe tener en cuenta el adecuado equilibro en la defensa de los derechos humanos y el uso de la fuerza en situaciones críticas reservado y ejecutado por especialistas debidamente capacitados que deberán contar con la tecnología que multiplique sus condiciones físicas y de inteligencia para reducir el número de policías ejecutivos”, comentó.

Layera expuso que la dignificación de la función basada en la profesión y contención debe estar remunerada teniendo en cuenta el riesgo, la esencialidad, la dedicación exclusiva y la especialidad.

El cuerpo policial está constituido este año por 27.000 efectivos en todo el país y en Montevideo se disponen de 100 patrulleros por turno.

En otra parte de la instancia, Layera expuso que es imprescindible una cultura prevento-disuasiva que mejore el tiempo de respuesta a la emergencia y atención de la denuncia.

“Por eso la observación y registro de espacios públicos y zonas críticas fortalecerán las operaciones”, apuntó.

Asimismo, apuntó que la investigación del delito deberá sustentarse en la criminalística científica con la obtención del adecuado recurso tecnológico en todo el territorio nacional en un tiempo no mayor a 60 minutos para relevar la escena.

“La prevalencia de la cultura preventiva sobre la represiva es una necesidad ineludible”, alegó.  

Enlaces relacionados

Audios