Impuesto a la concentración 
La recaudación del ICIR mejorará los caminos que usan los pequeños productores
Gabriel Furgoni señaló que la valorización extraordinaria de la tierra desplaza a los pequeños productores y añadió que el Impuesto a la Concentración de Inmuebles Rurales (ICIR) facilitaría –vía fideicomiso- US$ 400 millones para mejorar los caminos de los productores con menos de 2000 hectáreas. El tributo gravaría a 1200 empresas, de un total de 47.300. Sólo un 2,5% tributarán, las cuales poseen un 36% de la superficie productiva.

El director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Gabriel Frugoni, indicó a la Secretaría de Comunicación, que el Gobierno estudia posibles mecanismos de aplicación de la recaudación del ICIR, estimada en 60 millones de dólares anuales. Se analiza en tal sentido crear un fideicomiso que permita concretar en dos años por US$ 400 millones.
El Ejecutivo entiende- según se explicita en la exposición de motivos del proyecto- que el factor tierra se valoriza como recurso escaso en un escenario de aumento del precio de los commodities y liquidez internacional. El documento agrega que las obras de infraestructura también valorizan a la tierra. “Se está capitalizando un valor que es de toda la sociedad y toda la sociedad ha hecho un esfuerzo para que ello suceda”, subrayó.
Frugoni aseguró que esta valorización desplaza a los pequeños productores. El proyecto se complementa con una readecuación del régimen objetivo de determinación de renta por enajenación de inmuebles rurales adquiridos antes de 2007. El jerarca precisó que ello permitirá asignar nuevos fondos (estimados en US$ 20 millones anuales) para el Instituto Nacional de Colonización y contribuir a frenar el proceso de concentración.
La exposición de motivos del proyecto de ley precisa que en términos constantes el valor de la tierra en los últimos 10 años se multiplicó por cuatro. Argumenta, por consiguiente, que parte de ese valor añadido, independiente del esfuerzo del productor, es el que se captura mediante el tributo propuesto al Parlamento. Por otra parte, destaca que en los último 10 años la tributación total del sector agropecuario disminuyó casi un 30%, pasando del 9,7% del PIB agropecuario en 1999 a 7,1% en 2009.
El ICIR grava en US$ 8 por hectárea a las extensiones de entre 2.000 y 5000 hectáreas (Coneat100), en US$ 12 por hectárea a las extensiones entre 5.000 y 10.000 hectáreas (Coneat 1000) y con US$ 16 a las extensiones superiores a las 10000 hectaréas (Coneat 100).