Tabaco ilegal afecta principalmente a mujeres y hombres adultos de menores recursos
El 8 de mayo se desarrolló un foro convocado por el Centro de Investigación para la Epidemia del Tabaquismo (CIET) sobre comercio ilícito de tabaco. Se presentó una encuesta donde se indica que el tabaco ilegal es consumido mayormente por mujeres y hombres mayores de 40 años, con menor nivel educativo, que viven en la frontera. También se destaca que las políticas antitabaco lograron reducir un 30% el consumo total de tabaco.

El encuentro realizado en Montevideo contó con la participación de los ministros de Salud Pública, Susana Muñiz, y Relaciones Exteriores, Luis Almagro, y el director de Aduanas, Enrique Canon, y era uno de los procedimientos a seguir en el marco de la aprobación del Protocolo para la eliminación del comercio ilícito de productos de tabaco, de la OMS.
Uruguay no escapa a la incidencia de este fenómeno que afecta económicamente a todos los países y especialmente a la población de menores recursos. El bajo costo al que se ofrecen estos productos atrae a gran parte a las mujeres y a los hombres de más edad de ese sector de la población.
Mercado de productos del tabaco
Según el informe presentado por el CIET, de las 32.220 muertes ocurridas en el año 2004, 4.759 fueron causadas por el consumo de tabaco (14.8 %). Esto representa 13 muertes por día por esta causa.
Los datos recabados en la encuesta que el organismo internacional ITC (International Tobacco Control) realizó en Uruguay indican que, en 2008, el uso de tabaco ilegal era aproximadamente del 2 % en Montevideo, 67 % en Rivera y 58 % en Salto. En 2010 se relevaron datos en Durazno, donde ese consumo alcanzó el 15 %; en Rivera ascendió a 83 % y en Salto a 78 %. Estas diferencias geográficas se presentan tanto en cigarrillos como en tabaco para armar.
Otro dato que la investigación aporta es que, entre diciembre de 2003 y el mismo mes de 2012, el consumo de tabaco legal disminuyó en 2 cajillas per cápita aproximadamente, lo cual, sumado al aumento de los cigarrillos de contrabando, resulta en un descenso neto del consumo per cápita.
En todo el país, la venta de cigarrillos ilegales viene aumentando desde 2006, factor que se da mayoritariamente en los comercios formales, especialmente en los cafés, bares y almacenes que atienden las 24 horas.
Las mujeres consumen cigarrillos ilegales en mayor proporción que los hombres. En 2006, lo hacía el 12.6 % de las mujeres contra el 8.1 % de los hombres y en 2010 esas cifras aumentaron al 15.5 % y 16.3 %, respectivamente.
Las personas con menor nivel educativo son las que en mayor porcentaje consumen cigarrillos ilegales, al igual que las de más edad.
Precios, impuestos y productos de contrabando
Existen tres productos diferenciados por el precio: cigarrillos legales, de contrabando y tabaco para armar. Cuando los impuestos suben, se incrementa el precio de los tres tipos y, entre 2006 y 2010, el costo de los cigarrillos ilegales aumentó siguiendo el precio de los productos legales.
Resultados de las políticas antitabaco
Un estudio realizado —desde marzo de 1991 a abril de 2012—, revela que el consumo hubiera sido un 30 % más del que se registra actualmente. La prevalencia descendió a 23.6 % y esa disminución se aplica también a los jóvenes donde también se redujo a 13 %.
Luego de entrar en vigencia la ley aplicada en 2006, los infartos agudos del miocardio disminuyeron en un 22 %.
Conclusiones y recomendaciones
Los datos recabados en la encuesta presentada por el CIET, reafirman la necesidad de implementar el Protocolo de Comercio Ilícito de Productos de Tabaco al que adhirió Uruguay. También se observó que los que fuman tabaco de armar y cigarrillos ilegales no son alcanzados de igual modo por la Política de Control de Tabaco.
Debido a que la recaudación ha crecido con los aumentos de precios y de impuestos, pasando de US$ 84 millones en 2004 a US$ 320 millones en 2012, se recomienda utilizar una parte de los impuestos a programas de cesación, a la aduana y a desarrollar investigaciones sobre estos temas.