Talleres de UTU en Juan Lacaze y Sarandí del Yí incrementan oportunidades locales
El presidente de ANEP, Wilson Netto, afirmó que los proyectos educativos de UTU en Juan Lacaze y Sarandí del Yí demuestran cambios impulsados por conocimientos. Resaltó la relación del Estado con la sociedad; la capacidad de infraestructura y capital humano, así como los contenidos curriculares con carácter práctico que aportan a un nuevo modelo de sociedad. Son 8.000 los estudiantes involucrados en la educación tecnológica.
"La educación tecnológica tiene más de 250 áreas de conocimiento y la manera de asegurar la pertinencia es trabajando en ámbitos publico privados", aclaró Netto, este jueves, en la sala de prensa de la Torre Ejecutiva. “Es un cambio que implica que el Estado otorgue garantías a la socialización del conocimiento en el marco de la educación con involucramiento privado”.
Experiencia en Juan Lacaze
La directora de la Escuela Técnica de Juan Lacaze, María del Carmen Almada, explicó que es común que en localidades pequeñas el Estado y el sector privado estén vinculados. "No somos islas, tenemos puentes permanentes que nos unen. Solos no hacemos nada", expresó. También destacó que esos vínculos permiten acrecentar el conocimiento de los alumnos y de los actores institucionales de la zona. La Agencia para el Desarrollo dirige este parque industrial donde están ubicados los talleres de la Escuela Técnica. Almada aclaró que la permanencia en el parque industrial es una experiencia innovadora porque permite el vínculo con todas las industrias y sus actividades, en forma permanente.
Por su parte, Wylde Gonnet de la Agencia para el Desarrollo, indicó que Juan Lacaze es una ciudad industrial donde históricamente los vínculos estuvieron centralizados en el agro y la lana. A partir del año 1993, con el cierre de la empresa Campomar, se generó otro relacionamiento en la zona con otros actores empresariales. La situación permite transformar siete hectáreas y media de la fábrica Campomar en un parque industrial, declarado como tal el 10 de agosto de 2010 por el Poder Ejecutivo.
En este recinto industrial se ubican actualmente 10 empresas nacionales y argentinas, y los talleres de UTU también integran este espacio con especial énfasis en las áreas de electromecánica y electricidad. “Para una ciudad industrial, como Juan Lacaze, es esencial seguir desarrollando tecnicaturas agroindustriales y otras alternativas en el ámbito de UTU”, agregó.
Actualmente se está gestionando un proyecto de riego con el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, que demandará capacitación para los temas asociados al área de cultivos, experiencia que no está desarrollada en la región. Un comedor del INDA, que funciona a través de la Escuela Técnica, brinda una comida diaria a una parte de la población de determinado perfil que trabaja en áreas de mecánica y carpintería.
El ingeniero de la Fábrica Nacional de Papel (FANAPEL), Gustavo Gorni, explicó que la concreción del proyecto del Centro Politécnico Público Regional surge como resultado de una encuesta que reveló que el 94 % de 319 estudiantes, de 13 a 21 años, de diferentes liceos y centros de UTU deseaban estudiar una carrera en Montevideo pero sus familias no podían financiar los costos.
“En FANAPEL el nivel de conocimientos de los estudiantes que comenzaban a trabajar eran insuficiente para los requerimientos de la empresa, lo que determinó problemas de productividad”. En ese contexto, en marzo de ese año, se comenzó a dictar las clases de la Tecnicatura en Instrumentación y Control, a desarrollarse en tres semestres. Hoy 11 estudiantes ya culminaron el primer semestre en las instalaciones de FANAPEL. A su vez, UTU y FANAPEL desarrollan el proyecto de capacitación y acreditación de saberes en el área química.
Experiencia en Sarandí del Yí
Alejandro Echeverría presentó la experiencia educativa de CETP/UTU y la empresa Agua Viva en Sarandí Grande. “La construcción de capital humano no se agota ni con dinero ni con infraestructura. Es fundamental la construcción de ese capital a partir de infundir valores como la solidaridad, el humanismo, estar dispuesto a dar, que son acciones que sostienen proyectos”, indicó.
Este emprendimiento comenzó hace siete años a partir de la conformación de un grupo de productores denominado "Ocho meses de primavera" a iniciativa del actual Presidente de la República, José Mujica, cuando era ministro de Ganadería. El interés era incorporar tecnología de riego, pero el éxito de la propuesta estaba centrado en la existencia de recursos humanos calificados para contribuir al desarrollo del sector. En tal sentido, los encargados de los establecimientos de la zona se acercaron a la UTU con el objetivo de optimizar el manejo tecnológico.
El 17 de noviembre de 2011, comenzó a reunirse infraestructura y capacidades humanas para mejorar la educación de la Escuela Agraria. Ese proyecto tiene como objetivo principal la construcción de un tambo de riego de última generación y la puesta en funcionamiento de un campo de recría. Echeverría recordó que estos planes cuentan con el apoyo financiero del Banco República.