Uruguay y Ecuador fortalecen políticas de defensa en el marco de la integración
Los ministros de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro, de Uruguay, y María Fernanda Espinosa, de Ecuador, se reunieron este jueves 6 en el Club de la Fuerza Aérea para avanzar en acciones en el marco del acuerdo bilateral firmado en 2010. La cita sirvió además para buscar mecanismos de fortalecimiento en política del sector en consonancia con el resto de América Latina.
“La batalla principal que debemos emprender los gobiernos latinoamericanos es la erradicación de la pobreza y la desigualdad en la región, dijo la ministra Espinosa en conferencia de prensa al término de la reunión con su par anfitrión, Fernández Huidobro, el subsecretario de Defensa de Uruguay, Jorge Menéndez, el subsecretario de Defensa de Ecuador, Óscar Troya, y otros asesores.
"Necesariamente, el sector de la defensa debe aportar su trabajo para el ejercicio pleno de la soberanía en todos los ámbitos. No solo en el territorial, sino también en lo tecnológico y del conocimiento, y en el manejo y administración de los recursos naturales estratégicos”, puntualizó.
Espinosa manifestó la importancia de realizar una revisión del acuerdo firmado en materia de defensa en 2010. “Era necesario discutir los temas concretos para poder avanzar y fortalecer la relación bilateral, que se ha estrechado en estos últimos años”, indicó.
Destacó, además, el análisis realizado sobre el escenario de riesgos y amenazas, tanto para Uruguay y Ecuador como para el resto de los países de América Latina y el Caribe, en el que es clave el nuevo rol que deben asumir las Fuerzas Armadas.
“El gran reto para el sector de la defensa es cómo aportar en la construcción de una cultura de paz a nivel regional”, dijo la ministra visitante en alusión a los compromisos asumidos por los presidentes José Mujica, de Uruguay, y Rafael Correa, de Ecuador, en la pasada Cubre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en Cuba.
Señaló, además, la importancia del trabajo realizado en estos últimos años en materia de defensa cibernética. “Es de conocimiento público el tema del espionaje global y cómo nuestros países tienen la obligación de protegerse, y la mejor manera de hacerlo es en el marco de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur)”.
Finalmente informó sobre el apoyo que brindará el gobierno de su país a la Fuerza Aérea Uruguaya.
Ecuador tiene un gran stock de repuestos para la flota de aviones A-37, que tiene activa Uruguay, y que permitirá la utilización de aviones que al día de hoy no están habilitados.
“Esto va a potenciar la capacidad de defensa antiaérea de Uruguay con el stock y el material de repuestos que tiene el Ecuador, optimizando la operación de dichos aviones, proceso que se concretará en los próximos meses”, indicó.
Por su parte, el ministro Fernández Huidobro resaltó que este tipo de reuniones es “algo relativamente nuevo en la historia de nuestro país”. “La firma de tratados de defensa permiten profundizar la relación a través de intercambios bilaterales y de ayuda mutua”, comentó.
“Ecuador tiene su pecho mirando hacia el (océano) Pacífico, nosotros hacia el Atlántico, Venezuela y Colombia lo tienen contra el Caribe, y conjuntar todas esas posibilidades y visiones complementarias es una cantera que se está construyendo para nuestros descendientes”, sostuvo.
Con respecto a los recursos que tiene América del Sur, el ministro uruguayo reflexionó que “son estratégicos para el mundo y, en este sentido, Ecuador vivió una experiencia dolorosa por tener petróleo y tener la necesidad de recuperar su propio petróleo”, recordó.
“Nuestro país no tiene específicamente este problema, como otros pueblos hermanos, porque aún no tenemos esos recursos tan estratégicos y escasos que dan lugar a esos conflictos. Pero nosotros disfrutamos de uno muy importante, que es la producción de alimentos de excelente calidad, tan demandados hoy en el mundo”, analizó.
Fernández Huidobro despidió a su par ecuatoriana agradeciendo la ayuda desinteresada que Quito va a brindar a la Fuerza Aérea Uruguaya, “para poder conseguir cosas que son difíciles de obtener, ni siquiera con dinero”.
“La solidaridad permite que se abran estas oportunidades magníficas; hay un camino cierto y una enorme promesa para el futuro de nuestros pueblos”, enfatizó.