UTU de Santa Catalina recibirá hasta 1000 estudiantes y demandó inversión de $110 millones
La Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) organizó una visita de alumnos y padres a la nueva UTU de Santa Catalina . El local demandó una inversión de 110 millones de pesos, albergará hasta 1.000 estudiantes de Ciclo Básico y Medio Superior y surgió por iniciativa del barrio en procura de nueva oferta educativa. La propuesta terciaria se dirige a áreas como Gastronomía, Administración, Deportes y Electricidad.
Las clases en la flamante UTU de Santa Catalina —ubicada en Burdeos y Camino Santa Catalina, Montevideo— comenzarán formalmente este martes 17 de marzo, en un principio para 90 jóvenes de primer año de Ciclo Básico. El resto de los grupos iniciarán sus cursos durante esta semana y la siguiente. El edificio supuso una inversión cercana a los 110 millones de pesos y tiene capacidad para 1.000 estudiantes, pese a que en un comienzo la cifra será inferior. Solo en Ciclo Básico recibirá a 200 personas.
Los cursos de nivel terciario (Medio Superior) se desarrollarán en las áreas de Administración, Gastronomía, Deportes y Electricidad, entre otros, los que se irán incrementando a medida que vayan egresando las primeras generaciones y manifestando su interés por desarrollar diversas carreras. También funciona Formación Profesional Básica (FPB) para quienes quieran terminar estudios inconclusos. Asimismo, la institución ofrecerá talleres temáticos para adultos.
La iniciativa se caracteriza por su valor comunitario, ya que esta escuela se construyó a pedido de los propios vecinos, es una demanda de la gente de la zona, y en su construcción trabajaron, de una u otra forma, muchos vecinos.
Dado la amplitud del espacio físico, está previsto albergar en este edificio también propuestas vinculadas al quehacer cultural, como por ejemplo una murga de la zona. Según las autoridades, el objetivo es atraer a los vecinos al centro educativo y promover oportunidades de formación así como sentimiento de pertenencia en un barrio que ha demandado una serie de servicios y cuenta con jardín, escuela, UTU y policlínica a pocos metros de distancia.
El presidente del Consejo Directivo Central (CODICEN) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Wilson Netto, explicó que con esta obra se termina la “odisea” de muchos jóvenes del lugar que, una vez que culminan enseñanza primaria deben trasladarse hacia el Cerro, La Teja o Belvedere para seguir estudiando. “De ahora en más, esto implicará una dirección contraria, es decir que, según los intereses de los jóvenes, podrán venir de otras zonas a este local”, sostuvo.
“Esta comunidad que demanda servicios es un símbolo claro de desarrollo. Existe un acuerdo muy fuerte con las personas de la zona. Hay una gran alegría, se puede percibir. Se cuenta con el apoyo de las familias hacia los jóvenes, para que puedan seguir estudiando y cumplir así con el desafío de duplicar el número de estudiantes que culminan la Educación Media en el país”, agregó. En este sentido, recordó que para concretar esta meta hacen falta instalaciones, capacidades humanas y presupuesto, pero también disponer de acuerdos con las comunidades que generan el “colchón social” necesario.