Ahorro
Materiales didácticos
La importancia de las metas
¿Qué es el ahorro? Una forma sencilla de explicarlo, sería que es el resultado de la diferencia entre tus ingresos disponibles y tus gastos.
El ahorro implica guardar una parte de nuestros ingresos disponibles para que podamos utilizarlo en nuestro futuro: en otras palabras postergar el consumo inmediato para poder consumir en nuestro futuro. Por esto el costo de oportunidad de ahorrar es limitar el gasto en bienes y servicios en el presente.
Ahorrar nos puede ayudar a alcanzar metas a largo plazo y cumplir objetivos financieros de consumo, pero implica postergar algunos gastos. Cada persona identificará sus gastos y definirá cuales son postergables para lograr ahorrar.
¿Por qué ahorrar?
Durante nuestra vida decidimos ahorrar dinero por diferentes razones. Algunas de las motivaciones para ahorrar son:
- Cumplir objetivos financieros: que pueden estar relacionados con realizar compras de bienes costosos y/o durables; así como acceder a servicios y experiencias. Para eso es necesario trazar un plan y ahorrar con conciencia y determinación.
- Pagar unas vacaciones o alguna celebración familiar (cumpleaños, casamiento).
- Establecer un emprendimiento personal o mejorarlo, para lo que se necesita comprar bienes de capital (local, maquinaria, herramientas y equipos necesarios para el trabajo -inversión física-).
- Asumir costos vinculados a tu educación o profesionalización.
- Cubrir gastos imprevistos (arreglo del celular, emergencias médicas u odontológica, entre otros)
- Pagar deudas, si una persona desea cancelar en forma anticipada una deuda contraída puede querer ahorrar a fin de fortalecer su situación financiera.
Modalidades de ahorro-inversión
Podemos elegir ahorrar dinero de diferentes maneras:
- Guardando moneda nacional o moneda extranjera en nuestra casa, en modalidad alcancía.
- Depositando nuestros ahorros en un banco comercial, en una cuenta corriente o caja de ahorro (cuentas a la vista) que podamos monitorear con herramientas digitales.
- Realizando una inversión financiera con el objetivo de aumentar nuestra riqueza en el futuro. Las inversiones financieras más conocidas son los depósitos a plazo fijo y la adquisición de otros activos financieros, como ser bonos del tesoro, acciones, o participaciones en fondos mutuos o fondos de inversión.
Ahorro en casa
Dejar los ahorros en nuestra casa se denomina coloquialmente ahorro “en el colchón” o “ahorro en chanchita”.
Es líquido porque es dinero disponible, pero tiene el riesgo de perder poder adquisitivo por el efecto de la inflación además de estar expuesto a extravío o hurto. En general, las personas vamos tendiendo a dejar poca o nula moneda nacional o extranjera guardada en nuestra casa, más bien buscamos colocar nuestros ahorros en el sistema financiero (cuentas, depósitos, bonos, acciones, etc.) que nos reporte seguridad o algún interés que logre aumentar o mantener el capital original disponible.
Depósitos a la vista
Las familias, empresas y gobiernos guardamos nuestros ahorros en instituciones bancarias al realizar depósitos en ellas. Estos se pueden agrupar en depósitos a la vista o depósitos a plazo fijo. Los depósitos a la vista pueden ser en cuenta corriente o en caja de ahorros. Una de las ventajas de estos depósitos es que el dinero está disponible en cualquier momento y podemos retirarlo cuando queramos. A esto se le llama liquidez. A mayor liquidez o rápida accesibilidad al dinero depositado, menor será la rentabilidad que genera el ahorro (menores tasas de interés).
Los depósitos a la vista son útiles para otros propósitos además del ahorro. Por ejemplo: cobro y pago de sueldos, pagos de compra de bienes y servicios, débitos automáticos, transferencias o retiros de dinero a través de cajeros automáticos. Las cuentas corrientes nos permiten también emitir cheques que pueden usarse como medios de pago. Además, ofrecen como ventaja la seguridad, porque la mayoría de las cuentas de ahorro, tienen un seguro de depósito hasta cierto monto y la posibilidad de generar historial para ser cliente de crédito.
Algunas preguntas para pensar nuestras prácticas cotidianas:
- ¿Y vos? ¿Has intentado ahorrar?
- ¿Qué metas cumpliste con el ahorro?
- ¿Cuáles son los objetivos que te motivan a ahorrar?
- ¿Por qué has tenido que hacerlo?
- ¿Tenés algún objetivo financiero ?