Educación financiera

Piques para organizar mejor tu dinero

Materiales didácticos

Hay algunos hábitos que podemos automatizar para alcanzar finanzas más saludables. Te dejamos algunos piques.

Registrar nuestros movimientos de dinero.

Llevar una bitácora de nuestros ingresos y egresos de dinero nos permite conocer nuestros hábitos de consumo, dejando de lado “sensaciones” y ver realmente acciones. 
Este ejercicio nos ayuda a descubrir distintos gastos que hacemos cotidianamente, visualizando incluso pequeños gastos y magnificarlos para entender lo que implican en un período más extenso de tiempo (un mes, un año). 

Definir claramente nuestros objetivos financieros.

Proponernos metas nos ayuda a ver hacia dónde vamos y a diseñar un plan acorde a nuestras posibilidades para alcanzar ese objetivo. 

Armar un plan financiero.  

Conocer nuestras finanzas y pensar qué pasos vamos a dar para alcanzar los objetivos propuestos.  

Separar un porcentaje de nuestros ingresos al recibirlos (prever tu ahorro).

Vivir con el resto de nuestros ingresos, sin contar con lo que apartamos como ahorro. Este hábito podemos definirlo cuando llevamos un registro de nuestro ingreso y egreso de dinero y varía según la situación de cada persona.

Revisar nuestros objetivos y plan financiero de forma periódica.  

La vida cambia y así puede cambiar nuestro plan financiero, revisarlo nos permite ajustar lo necesario para alcanzar el objetivo propuesto. 

Contratar créditos que estemos seguros que podemos pagar.

Es importante pagar nuestros compromisos de crédito en tiempo y forma para librarnos de multas o recargos. De esta manera, estamos cuidando nuestra “huella financiera” y asegurando que dispongamos de los mejores productos adecuados a nuestro bolsillo. 
Si nuestra “huella financiera” registra una evaluación adecuada, nuestras condiciones de acceso a créditos serán mejor y más útil en nuestro presente y a futuro.