Más de 35.000 ciudadanos participaron del programa Uruguay Trabaja en 10 años
“Uruguay Trabaja es un programa de apoyo a la inserción laboral en el que han participado más de 35.000 personas en estos 10 años”, destacó la directora nacional de Economía Social del Mides, Mariela Fodde. Subrayó que aproximadamente un 35 % de los participantes se insertó al mundo laboral a través de cooperativas, emprendimientos productivos o trabajo dependiente.

El 71 % de los participantes de Uruguay Trabaja entre 2008 y 2016 eran mujeres y el 45 %, menores de 30 años. El dato está publicado en el libro que resume los 10 años del programa, presentado este miércoles 5. La titular de esta iniciativa destacó que este año se inscribieron 35.000 personas para un cupo anual de 3.000.
El objetivo es que los beneficiarios de esta herramienta de inclusión sociolaboral se integren a otros programas luego de los ocho meses de participación, dijo Fodde, lo que permitirá su desarrollo e inserción laboral.
Agregó que en el interior del país está funcionando el programa Uruguay Trabaja Rural, que agrupa emprendimientos de agricultura familiar, desarrollo ovino y avícola. Puso como ejemplo la experiencia piloto en Tomás Gomensoro, departamento de Artigas, así como otras iniciativas en Paysandú, Tacuarembó y Lavalleja.
Fodde participó del encuentro “Las políticas públicas de la economía social impulsadas desde Mides y su aporte a la agenda de los objetivos de desarrollo sostenible”, que se desarrolló en el salón de actos de la Torre Ejecutiva.
Uruguay Trabaja forma parte de las políticas de trabajo protegido, junto con Uruguay Clasifica, Primera Experiencia Laboral, Fortalecimiento de Capacidades y Competencias, Ruralidad, Cooperativas Sociales y Emprendimientos Productivos, y Redes. Todos ellos se dedican a la promoción de personas con vulnerabilidades específicas o restricciones de acceso al ingreso y sostenibilidad del mundo del trabajo.
Para acceder al programa Uruguay Trabaja, los ciudadanos deben tener entre 18 y 64 años, no haber culminado tercer año de liceo o UTU, encontrarse en situación de vulnerabilidad socioeconómica, no haber aportado por más de 90 jornales al Banco de Previsión Social en los últimos dos años y no haber participado en ediciones anteriores por más de tres meses.