Cancillería publicó informe referido a soberanía argentina sobre Islas Malvinas
El Ministerio de Relaciones Exteriores publicó en su página de Internet un informe denominado “El principio de libre determinación de los pueblos y su aplicación al conflicto sobre soberanía relativo a las Islas Malvinas”. Los argumentos y las conclusiones fundamentan el apoyo tradicional que Uruguay ha otorgado a los derechos de soberanía de la República Argentina sobre las Islas Malvinas.

En las conclusiones del informe se establece que luego de haber examinando los argumentos históricos, jurídicos y políticos que han presentado Argentina y el Reino Unido, el conjunto de fundamentos que sustentan la posición argentina resultan más sólidos que los esgrimidos para sustentar la posición británica.
El informe explicita que "el Reino Unido reclama un derecho histórico inexistente puesto que el primer asentamiento en las Malvinas era una colonia francesa y Francia cedió territorios a España. Por tanto, no es dable reclamar un derecho originario cuando los antecedentes remotos del descubrimiento y primera población no reconocen al Reino Unido como el actor principal ni jurisdicción alguna sobre las islas".
A su vez, los países latinoamericanos y principalmente la Argentina, en el período histórico en que se producen los sucesos que surge y se consolida la independencia de las jóvenes repúblicas en América Latina, sostienen con firmeza el principio del uti possidetis (principio en virtud del cual los beligerantes conservan el territorio poseído al final de un conflicto, salvo que se disponga otra cosa por un tratado).
Los Estados nacidos en 1810, a partir de la independencia de las colonias españolas, admitieron en general fijar sus fronteras internacionales sobre la base de las divisiones administrativas de la antigua colonia española.
Esto lleva a considerar al concepto de terra nullius en América latina como inaplicable.
En suma, prosigue el Informe, los argumentos históricos aportados por Argentina son más sólidos que los del Reino Unido, sustentados además por una doctrina latinoamericana que se afirmó en fundamentos políticos y jurídicos incontestables y cuyo corolario fue el rechazo de cualquier fenómeno de colonización en el territorio americano.
El informe de Cancillería agrega que "ambos países son capaces de esgrimir argumentos consistentes, que oponen principios cardinales de las Naciones Unidas que no tienen precedencia claramente establecida del uno sobre el otro".
Sin embargo, la clara ubicación de la cuestión de las Islas Malvinas como un caso de descolonización en el cual —a diferencia de otros casos— la población del territorio no autónomo involucrada no constituye un pueblo subyugado, sino un pueblo originario de la potencia colonial que lo administra, permite sustentar la no aplicación del derecho de autodeterminación con el alcance con el que se lo previó para los pueblos originarios sometidos a la ocupación colonial.
Respecto a la primacía o no del derecho de autodeterminación, la Asamblea General de ONU, decidió cuáles territorios no eran autónomos en el sentido del capítulo XI de la Carta de Naciones Unidas a través de la resolución 66 (I) aprobada en 1946, por la cual se enumeraron los 74 territorios. Este punto es relevante puesto que al considerar las Islas como territorios no autónomos, se está haciendo primar el principio de descolonización sobre el principio de autodeterminación, lo que debería interpretarse como un elemento que fortalece el reclamo argentino.
La cuestión de Malvinas es un caso de descolonización, tal como lo afirma la Resolución 2065 (XX) de 1965 y eso nadie lo ha objetado.
El documento de la cancillería uruguaya prosigue sosteniendo que "desde este punto de vista, pretender esgrimir este principio abstrayéndose del contexto histórico, político y jurídico en el que se ubica la controversia sobre la soberanía de las Islas Malvinas, constituiría una pretensión de aplicar estrictamente el principio, pero sobre una base falsa".
Este conjunto de argumentos que han sido analizados y las conclusiones a las que es posible llegar, sirven de claro fundamento al apoyo tradicional que el Uruguay ha otorgado a los derechos de soberanía de la República Argentina sobre las Islas Malvinas.
En función del análisis realizado, podemos observar que Argentina no ha puesto en cuestión el principio de libre determinación en sí mismo, pero sí su aplicabilidad al caso Malvinas.
De acuerdo al referido Informe, "Argentina siempre ha tratado de demostrar que las Malvinas no son un territorio colonial clásico, sino una colonia establecida por el Reino Unido en un territorio usurpado a la Argentina. Por lo tanto, permitir que la población británica de las Islas se constituya en árbitro de una disputa de la que su propio país es parte, tergiversa el derecho a la libre determinación de los pueblos".