Incorporó más de 100.000 hectáreas

Colonización compró 25 % de patrimonio en tierras y consolidó política en últimos 10 años

A pesar de que el lunes próximo cumple 67 años, el Instituto Nacional de Colonización fortaleció en la última década su política de acceso a la tierra para que los más humildes desarrollen proyectos productivos. Alrededor de 25 % de sus tierras fueron adquiridas a partir de 2005 y en el pasado quinquenio dispuso de 55.000 hectáreas para 1.500 familias. La demanda no merma, lo cual garantiza la continuidad de esta estrategia.

Colonia Fernández Crespo en el departamento de San José
La presidenta del Instituto Nacional de Colonización (INC), Jacqueline Gómez, dialogó con la Secretaría de Comunicación sobre los resultados de la gestión de la actual administración y la transformación que afrontó en estos 10 últimos años el ente y la política específica en Uruguay.

El próximo lunes 12 se conmemora un nuevo aniversario, el número 67, de la promulgación de la ley N° 11.029 de creación del INC, coincidente con el cierre de un nuevo período de gobierno, lo cual amerita hacer un primer balance de los últimos cinco años.

“En este quinquenio, el instituto avanzó mucho en la compra de tierras”, señaló Gómez, quien recordó que esta administración finalizará con más de 55.000 hectáreas adquiridas e incorporadas bajo la Ley de Colonización.

En estos cinco años se incluyeron más de 1.500 familias de colonos a proyectos productivos, indicó. El beneficio permite que accedan al arrendamiento de estos predios por 50 % del valor de mercado, lo cual facilita su desarrollo. 

En la compra de las 55.000 hectáreas, el actual Gobierno de José Mujica invirtió más de 180 millones de dólares.

Unas 5.000 hectáreas de ese total son tierras del Estado que pertenecieron a los ministerios de Defensa Nacional e Interior, que las transfirieron al INC en modalidad de comodato. El resto se compraron a privados.

Los recursos para estas inversiones provienen en gran parte de dos impuestos, que son el de la Concentración de Inmuebles Rurales, tras sus modificaciones luego de ser declarados inconstitucionales algunos de sus artículos, y el de las Transacciones Patrimoniales. Los saldos positivos de la gestión también se invirtieron en la compra de tierras.

Por otra parte, se profundizó el proceso de mejora de la gestión, en lo que respecta a la cobranza de la renta. El 74 % de los colonos tienen sus pagos al día, lo cual es considerado un valor histórico para el instituto.

Según indicó la titular, mejoraron los tiempos entre la compra de los campos y la adjudicación a los colonos. “Hay muchos procesos internos que reflejan una mejora de la gestión a la propia interna del Instituto”, reafirmó Gómez.

“Hoy el INC es una institución completamente distinta a la de 2005. El nivel de actividad, la compra de tierra, la adjudicaciones y el vínculo con los colonos y la respuesta de los funcionarios es mucho más activa comparado a la historia del organismo, que en 2000 estuvo detenido y a punto de cerrarse”, puntualizó.

“De 2005 hasta ahora compramos más de 100.000 hectáreas, lo cual representa 25 % de las tierras que el INC tiene en arrendamiento”, un “ritmo de incorporación de tierras que es una definición política del Gobierno que sale y del que entra (de Tabaré Vázquez)”.

“Seguiremos incorporando tierras al INC, distribuyéndolas entre productores familiares y asalariados rurales, promoviendo los procesos colectivos como medio de acceso a la tierra y generando valores de cooperativismo y asociativismo”, amplió.

Gómez entiende que esta definición política, que indica que productores familiares y asalariados rurales tienen derechos y es necesario hacer una política de tierras para mantener a la gente en el campo para sostener una estructura agraria, se vio reflejada en la transferencia de los recursos que se le dio al INC y en el nivel de actividad actual.

Sectores productivos a desarrollar
En esta gestión de los últimos cinco años se impulsó el desarrollo de la lechería entre los colonos.

Algunas colonias, como Encarnación Benítez y Reglamento de Tierras de 1815, desarrollaron innovaciones tecnológicas en el rubro. La gestión finaliza con los llamados a la colonia que se va a desarrollar en Gregorio Aznárez, en el departamento de Maldonado.

También se fortaleció el acceso a la tierra de grupos de asalariados rurales y productores familiares ganaderos, sobre todo en el norte del país donde existe un porcentaje importante de personas que se dedican a esta labor.

En lo que respecta a la granja, el INC trabajó fuerte en la recomposición de las colonias en la zona metropolitana. “Recompramos las tierras que eran del Instituto y que estaban en manos de propietarios y se volvieron a adjudicar, sobre todo en forma individual”, relató.

Decisiones importantes
Según evaluó Gómez, las autoridades del INC tomaron dos decisiones importantes en 2014, que integraban el Plan Estratégico definido en 2010.

Por un lado se resolvió avanzar en la cotitularidad en la tenencia de los predios. “Cada llamado que hagamos a fracciones individuales se podrán arrendar por ambos integrantes (hombre y mujer). Esto supone mejores condiciones de justicia y equidad entre hombres y mujeres, y un avance en las políticas de género”, agregó.

Por otro, el 20 de diciembre se cerró el año con el Primer Encuentro Nacional de Delegados de Grupos de Colonos que desarrollan proyectos colectivos en tierras de Colonización.

A ese encuentro concurrieron 210 delegados de todo el país, de los 147 grupos que existen hoy en el instituto, de todas las regionales y rubros. "Fue un espacio de discusión y análisis de las políticas de acceso colectivo a la tierra. Evaluaron dificultades y ventajas de la modalidad, intercambiaron experiencias y dejaron una serie de sugerencias", detalló Gómez.

Asimismo, en estos últimos años se profundizaron los acuerdos interinstitucionales, sobre todo en infraestructura con Mevir (Comisión Honoraria Pro Erradicación de la Vivienda Rural Insalubre) y UTE, lo cual permitió, por ejemplo, la construcción de parques eólicos en varias colonias.

También hubo acuerdos en materia de formación y educación con el Instituto Plan Agropecuario (IPA) y con el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop).

Responsables ante la oportunidad
Gómez consideró que con esta política se atiende a los sectores más vulnerables del medio rural quienes, si no la tuvieran, no accederían a la tierra y no se podrían mantener.

Actualmente la demanda continúa siendo superior a las capacidades de cobertura. En los llamados individuales se cubre 16 % de lo que se requiere y en los emprendimientos grupales se satisface solo 30 % en promedio.

“La demanda de tierra existe en todo el país. La gente se organiza y busca estrategias para armar una propuesta que mejore sus condiciones de vida y su calidad de trabajo”, indicó.

“Por esa demanda insatisfecha es que se debe seguir trabajando y supervisando a quienes usufructúan esta política pública, para que cumplan con las obligaciones establecidas, porque en definitiva es la sociedad uruguaya la que les da la oportunidad”, sostuvo.

Ser colono
Los interesados en convertirse en colonos deben ser productores familiares o asalariados rurales capaces de ejecutar un proyecto productivo, además de contar con algunos recursos disponibles y conocimiento del trabajo rural. 

Es imprescindible tener necesidad de acceso a la tierra e imposibilidad de resolverlo por otro medio.

Se prioriza en productores con dificultades de escala, que no pueden crecer ni mantenerse en el medio rural por distintas razones, personas con desalojo de tierras y asalariados rurales.

El INC exige residencia en el lugar del proyecto productivo, utilización de fuerza de trabajo para llevarlo adelante (hecho con sus propias manos), cumplir con las obligaciones del pago de rentas y cuidar los recursos naturales.

Por más información es posible consultar a las Oficinas Regionales del Instituto de Colonización o la página de internet del INC: www.colonizacion.com.uy.

Enlaces relacionados

Audios