Gestión de residuos

Dirección de Medio Ambiente supervisa siete plantas de tratamiento de envases

En cumplimiento de la normativa sobre la recepción y el tratamiento y reciclaje de envases en desuso provenientes del sector productivo animal y vegetal, el centro de acopio Melilla reinauguró obras adecuadas para ese fin. Actualmente funcionan siete plantas de este tipo y la Dirección Nacional de Medio Ambiente les exige dos canales para la recepción de materiales y su descontaminación mediante triple lavado.

Centro de acopio de residuos Melilla

El Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente exige, desde 2013, la aplicación de la normativa existente sobre la recepción y tratamiento de envases plásticos o de metal en desuso con la finalidad de minimizar su impacto medioambiental.

En ese sentido, el sitio web de esa secretaría de Estado informa que el viernes se reinauguró el centro de acopio Melilla, que recibe envases vacíos provenientes del sector de la producción animal y vegetal. Este centro forma parte del programa Campo Limpio, con las reformas realizadas también podrá recibir envases semirrígidos y no rígidos, como bolsas y bolsones de fertilizantes, que no pueden ser lavados.

La normativa actual, regida por el decreto 152/013, implica la obligación de presentar dos canales de recepción: uno para envases limpios y otro para envases sucios, en los cuales se concreta el tratamiento y destino adecuado para preservar el medio ambiente.

En esa planta se aplica el principio de responsabilidad extendida a todos los sectores involucrados, como los importadores, fabricantes, distribuidores, aplicadores y productores. Actualmente existen siete centros de acopio en funcionamiento.

La Dirección Nacional de Medio Ambiente los obliga a minimizar la generación de estos residuos y asegurar los medios para recibir, almacenar, acondicionar, transportar y reciclar los que se generen, de manera de promover su mejor aprovechamiento y el mínimo impacto en el ambiente.

De acuerdo a la operativa del plan, los puntos de distribución y venta funcionan como centros de recepción primarios de estos envases. A su vez, forman parte de una red más amplia que incluye los centros de acopio que reciben envases de plástico o metal que han contenido productos fitosanitarios y fertilizantes.

Los envases fitosanitarios descontaminados por triple lavado y las bolsas de fertilizantes son enviados a reciclaje controlado, donde solamente se permite la elaboración de productos autorizados.

Centro de acopio Melilla
Esta locación comenzó a funcionar en 2006 y es una de las pioneras en esa labor. Su gestión está a cargo de la Cooperativa Jumecal, y oficia de servicio de productores y empresas que encuentran allí un lugar para depositar sus envases vacíos derivados del uso de productos químicos o biológicos, y así contribuir al cuidado del ambiente.

Según constata el portal, el rol del productor rural es considerado clave en este proceso, en particular en el sistema de triple lavado, necesario para eliminar la categoría de “peligroso” del envase y transformarlo en un material reciclable.

En la reinauguración del Centro de Acopio Melilla participaron representantes de la Cooperativa Jumecal, del programa Campo Limpio, técnicos de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama), de CropLife Latin America, integrantes de la Cámara de Agroquímicos, empresas de insumos del sector y productores.

La reforma del centro estaba contemplada dentro del plan de gestión presentado por Campo Limpio.

En representación de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama), el jefe del Departamento de Residuos Sólidos y Sustancias, Federico Souteras, destacó la importancia de la reforma y de “utilizar la infraestructura a disposición para que el programa siga creciendo”.

Se refirió al sector primario como “clave” en este proceso y agregó que  “debemos insistir en el triple lavado y trabajar en concientización”.