En foro de ONU se destaca ampliación de derechos sociales, laborales y sexuales
Ante la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, de Naciones Unidas, la titular del Instituto Nacional de las Mujeres, Mariella Mazzotti, destacó que Uruguay logró avances específicos hacia la igualdad gracias a un marco normativo avanzado en materia de derechos sexuales y reproductivos, matrimonio igualitario y leyes de protección de derecho al trabajo rural y doméstico.

Mazzotti presidió la delegación oficial que representó a Uruguay del 14 al 24 de marzo en la sexagésima sesión de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer de Naciones Unidas (CSW, por su sigla en inglés), en la sede de la organización en Nueva York.
La comisión es el principal órgano intergubernamental dedicado a la promoción de la igualdad de género. Este año trabajó con la consigna “El empoderamiento de la mujer y su vínculo con el desarrollo sostenible”, en el marco de los retos y oportunidades para la Agenda Global 2030 que impulsan la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En su intervención, Mazzotti reafirmó la voluntad política de Uruguay de cumplir los compromisos internacionales de promoción y defensa de los derechos humanos de las mujeres ya asumidos y renovados en el marco de la nueva Agenda Global 2030 a través de los Objetivos de Desarrollo Sustentable, que se sintetizan en la expresión: “Más Igualdad, Compromiso de Estado”.
Como avances, destacó la instalación de un marco normativo avanzado en materia de derechos sexuales y reproductivos, matrimonio igualitario, así como la implementación de leyes de protección de los derechos al trabajo de grupos rezagados como quienes se dedican a tareas domésticas y rurales, entre otras.
Mencionó problemas específicos para el desarrollo autónomo de las mujeres uruguayas, como la violencia de género, la baja representación de las mujeres en puestos de decisión estratégicos, el embarazo adolescente y las desigualdades en el mercado laboral.
También difundió las prioridades del Gobierno, como la creación de un sistema de respuestas en materia de violencia basada en género, la aprobación de una ley integral en violencia de género, una educación libre de estereotipos de género y discriminación, la protección en salud sexual y reproductiva, la disminución de las diferencias de oportunidades en ámbitos del empleo y la creación de un Sistema Nacional de Cuidados que aporte a la corresponsabilidad de los cuidados entre mujeres y varones, Estado, comunidad y mercado.
Recordó que Uruguay reinstaló el Consejo Nacional de Género, con la participación de organismos públicos y movimientos de mujeres y feministas, representantes académicos y empresariales, donde se definieron las prioridades para el quinquenio 2016-2020 con un Plan de Acción por una Vida Libre de Violencia de Género.
En la ONU, Uruguay junto con Develpoment Alternatives with Women for a New Era (DAWN) organizó un evento sobre la Guía Operacional para la Implementación y Seguimiento del Consenso de Montevideo, especialmente en sus capítulos sobre igualdad de género y derechos sexuales y reproductivos. Asimismo, Mazzotti representó a Uruguay en el evento paralelo “Alcanzando la paridad en la representación internacional”.