Instituto de Alimentación mejoró nutrición de 200.000 personas con transferencia monetaria, alimentos y apoyo técnico
“Llegamos a más de 200.000 personas de Uruguay. Apoyamos con alimentos secos para desayuno y merienda a 600 organizaciones públicas y privadas; a los CAIF, que atienden a niños de entre 0 y 2 años; mediante transferencias monetarias, a enfermos crónicos con desnutrición y a celíacos, que integran cerca de 25.000 hogares; también a través del Sistema Nacional de Comedores”, resumió el director del INDA, Gerardo Lorbeer.

El Instituto Nacional de Alimentación (INDA) apoya a 600 instituciones públicas y privadas que atienden a la primera infancia, a los adultos mayores, a personas con discapacidad, así como a centros deportivos y educativos, a los que les transfiere víveres secos para elaborar desayunos y meriendas, informó Lorbeer, entrevistado por la Secretaría de Comunicación Institucional.
También asiste a pensionistas, con transferencias monetarias que realiza el Banco de Previsión Social. Asimismo, cedió al Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay los créditos de alimentación, que antes eran por transferencia y ahora se gestionan de forma directa. El acompañamiento técnico para la elaboración de menús continúa, así como los controles de las plantas físicas de los centros y la manipulación de alimentos que se realiza en los centros de atención a la infancia y la familia (CAIF).
El Sistema Nacional de Comedores atiende en los almuerzos unos 9.000 comensales, afirmó el director. Los comedores que funcionan en Montevideo son propiedad del INDA, mientras que en el interior de Uruguay brindan servicios en convenio con las intendencias. “A ellos se les transfieren tres tipos de mercaderías: los víveres secos que se utilizan para elaborar las distintas comidas, carne vacuna fresca y dinero para que compren alimentos frescos, como verduras, en sus propios departamentos”, señaló el jerarca.
En 2016 se registraron en Uruguay 46.000 nacimientos, en el hospital Pereira Rossell nacieron 7.000 niños, afirmó. El año pasado, se elaboró un plan piloto que captó al 30 % de madres y niños (más de 2.000) a los que la oficina territorial del Ministerio de Desarrollo Social (Mides) les tramitó la cédula de identidad, la asignación familiar o la Tarjeta Uruguay Social, para acercarles servicios del Estado. “Esa captación se aplicará en otras maternidades de Uruguay, para apoyar a la primera infancia, a las madres y las familias”, agregó.
Lorbeer destacó que el apoyo con alimentos se realiza a través de la Tarjeta Uruguay Social, que se otorga a personas con riesgo nutricional, enfermos crónicos o pacientes celíacos, de pequeñas localidades de Uruguay, donde no abundan los alimentos libres de gluten. Los celíacos atendidos por el INDA son aproximadamente 9.000. La transferencia para todos estos grupos de riesgo es de 600 pesos por mes por persona, monto que se suma, en algunos casos, a la Tarjeta Uruguay Social que se otorga a hogares con niños con un límite de hasta cuatro hijos, 2.667 pesos, o, en caso de extrema vulnerabilidad, un máximo de 5.334 pesos por familia.
“No hay recortes de presupuesto en el INDA ni los programas tienen menos amplitud. Los programas se reestructuraron, porque se aplicaron nuevos criterios de unificación de transferencias de alimentos, con el objetivo de que fueran más integrales y llegaran con mayor cercanía a los hogares, algunos de los cuales el Mides ya estaba trabajando”, afirmó, en referencia a que el INDA se integró al ministerio en 2015. “La potencialidad de descentralización que tiene el Mides en el territorio nacional nos permitió visitar a las personas en sus hogares, realizar acompañamientos técnicos, como en el caso de los enfermos crónicos con riesgo nutricional”, indicó.
También se captaron personas en situación de vulnerabilidad social a través de programas como Cercanías, Uruguay Crece Contigo, con énfasis en atención a la primera infancia y embarazadas, o que estaban en Jóvenes en Red. “Para el INDA fue un cambio sustancial, que aportó una mirada más universal con respecto a los beneficios, lo que redundó en una mayor llegada al territorio y no solamente cumplir con una demanda de oficina”, concluyó en entrevistado.