Ministerio comienza estudio para detectar niveles de gas radón en hogares uruguayos
Técnicos del Ministerio de Industria, Energía y Minería informaron que se hará un estudio para diagnosticar por primera vez en Uruguay el grado de concentración de gas radón en hogares, en el marco de programas de seguridad radiológica implementados por recomendación internacional. Empero, el experto Alejandro Nader aclaró que, debido a la geología y al tipo de construcciones, se descarta que esto sea un problema en el país.

La Autoridad Reguladora Nacional en Radioprotección (ARNR) implementará un plan experimental para detectar y eventualmente medir en las viviendas uruguayas la concentración de radón, un gas noble radiactivo que en altas concentraciones puede resultar peligroso para la salud humana.
Aunque debido a la geología y a las construcciones existentes se descarta que sea un problema para este país, el seguimiento es obligatorio siguiendo las recomendaciones internacionales. Será la primera vez que se realice este estudio en Uruguay.
En ese contexto, Nader, asesor ministerial en la materia, y el director de la autoridad reguladora, Walter Cabral, presentaron este martes a representantes del sector de la salud, vivienda y arquitectura las acciones previstas sobre protección de las personas contra la exposición al radón en los hogares.
Este estudio estará enmarcado en el proyecto de cooperación técnica sobre protección radiológica del público que la institución mantiene con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
En línea con lo establecido en las Normas Internacionales de Seguridad del OIEA, el trabajo contará con la asesoría de Fabio López, experto en la materia de este organismo que funciona en la órbita de la Organización de las Naciones Unidas.
El radón, que constituye 50 % de la radiación natural a la que los seres vivos están expuestos, proviene de la corteza terrestre y de materiales de construcción.
Aunque las concentraciones de radón no son muy relevantes en la región y, por lo tanto, se prevé que no lo sean en Uruguay, es necesario realizar mediciones como parte de la seguridad radiológica.
En diálogo con la Secretaría de Comunicación, Nader señaló que la OIEA pone como condición la obligación de hacer un mapeo y por ello fue que llegó a Uruguay el especialista López, quien asesorará en la puesta en práctica del plan de monitoreo que se desarrollará en viviendas de Montevideo y de al menos otras dos ciudades.
Este experto en seguridad radiológica del ministerio subrayó que el plan no tendrá costo para el país, ya que los dispositivos para realizarlo serán proporcionados gratuitamente por la OIEA.
Para ejecutarlo se requerirá que las personas que contacte la cartera estén dispuestas a instalar durante tres meses un monitor “absolutamente pasivo” (de plástico y no frágil) en sus viviendas, para determinar los niveles del gas. Este estudio, que se ha realizado en Suecia, comenzará a implementarse en los próximos meses con la medición en unos 150 hogares.
“En América Latina son muy pocos los países que tienen este tipo de mediciones. Solo Argentina, Brasil, México, algo Cuba y ahora Uruguay, que comienza con el primer paso”, enfatizó el experto ministerial.
Educación, capacitación, ventilación adecuada, cuidar los tamaños mínimos de aberturas en los hogares son algunas de las medidas de optimización para llevar al mínimo la exposición al gas radón, sugirió Nader.
Agregó que el valor de radón a partir del cual se deben tomar medidas y realizar un protocolo para minimizar su presencia y los efectos nocivos se sitúa en 300 becquerel (unidad de radiactividad que equivale a una desintegración nuclear por segundo) por metro cúbico de aire para el nivel doméstico (bq/m3), mientras que el límite para el radón ocupacional se ubica en 1000 bq/m3.
“Esto se hace en Uruguay porque hay una valoración positiva desde Viena del nivel de seguridad radiológica que hay en el país”, concluyó el experto.