Audición en emisora M24
“Una cosa es el apasionamiento, el compromiso con lo que se siente, piensa o vive, pero otra cosa es la ceguera fanática de imponer a prepo lo que se piensa”, dijo Mujica en parte de la alocución de este viernes por radio M24, en referencia a la violencia desatada en la capital francesa, en especial el ataque perpetrado el miércoles contra la redacción de la revista satírica Charlie Hebdo, en el que murieron 12 personas y resultaron heridas varias más.
Reconoció las inevitables contradicciones de intereses, ideas, credos religiones, corporativismo, o cualquier tipo de grupo con ciertas peculiaridades en relación con el interés general de la sociedad, que existirán siempre, pero advirtió que esto no debe conducir a una mezcla de contradicciones que desemboquen en fanatismos.
No hay “nada peor que la mentalidad fanática”, afirmó.
Mujica, tras lamentar los “amargos sucesos” ocurridos en París, comparó la extrema violencia con la que sufren países como Argelia o Siria, que sufre una guerra civil que ha costado millones de vida.
A su entender debe existir un culto a la tolerancia, para que la sociedad no se enferme, aunque haya cosas en el pasado que lastimen, duelan y hasta (hayan producido heridas que) supuran, inclusive si hay falta de verdad, puntualizó.
“Lo máximo que pueden hacer los hombres en materia de justicia es ser honrados, nunca ser perfectos, porque lo perfecto es según el ángulo desde el que se esté mirando”, añadió.
Para el mandatario uruguayo, respetar la justicia es clave, “porque los seres humanos tendemos a caer en lo peor que es hacer justicia por mano propia”.
Por eso “tenemos que cultivar el espíritu de tolerancia aunque sintamos que la visión que tenemos de la realidad nos hace trampas”, dijo.
“Tenemos que aprender de lo que pasa en el mundo y que lo que les ocurre a otros nos puede pasar mañana a nosotros. La tolerancia es la semilla para que germine la democracia”, reflexionó.
Mujica condena atentados en París que obedecen a “fanatismos lacerantes de nuestro tiempo”
El Presidente José Mujica lamentó los “amargos sucesos” ocurridos en Francia y los comparó con la extrema violencia que sufren otras sociedades, como en Argelia y Siria. “Son fanatismos lacerantes de nuestro tiempo” con pretextos religiosos, corporativos y hasta deportivos, que “nos obligan a plantearnos la necesidad de cultivar la tolerancia a la diversidad, cuestión imprescindible para convivir en el mundo actual”, subrayó.

Reconoció las inevitables contradicciones de intereses, ideas, credos religiones, corporativismo, o cualquier tipo de grupo con ciertas peculiaridades en relación con el interés general de la sociedad, que existirán siempre, pero advirtió que esto no debe conducir a una mezcla de contradicciones que desemboquen en fanatismos.
No hay “nada peor que la mentalidad fanática”, afirmó.
Mujica, tras lamentar los “amargos sucesos” ocurridos en París, comparó la extrema violencia con la que sufren países como Argelia o Siria, que sufre una guerra civil que ha costado millones de vida.
A su entender debe existir un culto a la tolerancia, para que la sociedad no se enferme, aunque haya cosas en el pasado que lastimen, duelan y hasta (hayan producido heridas que) supuran, inclusive si hay falta de verdad, puntualizó.
“Lo máximo que pueden hacer los hombres en materia de justicia es ser honrados, nunca ser perfectos, porque lo perfecto es según el ángulo desde el que se esté mirando”, añadió.
Para el mandatario uruguayo, respetar la justicia es clave, “porque los seres humanos tendemos a caer en lo peor que es hacer justicia por mano propia”.
Por eso “tenemos que cultivar el espíritu de tolerancia aunque sintamos que la visión que tenemos de la realidad nos hace trampas”, dijo.
“Tenemos que aprender de lo que pasa en el mundo y que lo que les ocurre a otros nos puede pasar mañana a nosotros. La tolerancia es la semilla para que germine la democracia”, reflexionó.